QSL se lleva dos contratos millonarios el mismo día y sin competencia

La empresa QSL Serveis Culturals, propiedad del empresario Jesús Poza, acaba de llevarse dos suculentos contratos del Ayuntamiento de Barcelona para gestionar los centros cívicos Sarrià y Vil·la Florida, ambos en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. Ambos fueron otorgados el mismo día, el 5 de marzo, y en ambas ocasiones sólo concurría la empresa beneficiada. Por el primero, la compañía QSL se embolsará 566.272 euros; por el segundo, 552.672 euros. En total, pues, más de un millón de euros en una sola jornada.

En ambos casos, según consta en la documentación municipal, se trata de procedimientos restringidos. Los contratos con por dos años para la gestión de ambos centros, aunque podrían prorrogarse por otros dos años. Paradójicamente, el valor estimado del contrato del centro cívico de Sarrià, según el pliego de cláusulas administrativa particulares, es de 1.849.584 euros, mientras que el de Vil·la Florida se eleva a 2.009.334 euros. En ese caso, el gasto total sólo en estos dos centros durante el próximo cuatrienio llegaría a más de 3,8 millones de euros.

DESVIACIONES DEL PRESUPUESTO

Estas cantidades abarcarían la totalidad del periodo previsto de gestión, incluidas las prórrogas. Esa abismal diferencia es porque se incluyen en las previsiones posibles desviaciones del presupuesto, hasta totalizar 185.000 euros al año en el caso de Sarrià o 215.000 euros anuales en el caso de Vil·la Florida (ya sea por modificaciones previstas, por cargos que debe aportar el distrito o por otros conceptos, es decir, imponderables que la compañía se vea obligada a realizar).

Centro cívico de Sarrià

En el informe de justificación de la gestión los centros (los informes de ambos son idénticos), los técnicos municipales señalan que el objetivo de QSL ha de ser “desarrollar actuaciones que fomenten la práctica sociocultural del conjunto de la población, posibilitar el acceso y estimular el consumo de bienes sociales, culturales y artísticos. Además, ha de potenciar las instalaciones como espacios de relajación y encuentro para promover y posibilitar la integración social y la participación activa de la población. También debe impulsar “referentes colectivos que colaboren con la articulación de la comunidad, el tejido social y la ciudadanía, teniendo en cuenta y estimulando la presencia estable de vecinos y vecinas de diversos orígenes y la aportación de sus valores al conjunto de la vida comunitaria”.

FACILITAR LA INTEGRACIÓN

Se trata, en resumen, de facilitar la integración asocial y de colaborar en la articulación y cohesión social del territorio. Para ello, deberán de tener en cuenta a lo sectores de la población con más dificultades para acceder al consumo de bienes culturales y colmar los intereses de sectores de población con demandas, necesidades y prácticas socioculturales específicas, ya sean inmigrantes, jóvenes, ancianos o mujeres. En el catálogo de servicios, se encuentran ofertas para dinamización infantil y juvenil, de gente mayor, apoyo a la creación, exposiciones, conferencias, debates, espectáculos o actividades formativas.

Estas actividades podrán ofrecerse en el formato de talleres, cursos o con otras fórmulas, “basadas en el aprendizaje no formal y que posibiliten la creación, la participación y la relación de las personas”. Las cláusulas del contrato prevén, para el centro de Sarrià, un mínimo de 120 talleres al año con una duración mínima de 1.200 horas y podrán ser tanto presenciales como online. Para Vil·la Florida, se harán 185 talleres al año con 1.850 horas como mínimo.

PARTICIPAR EN LAS FESTIVIDADES

Otro de los cometidos de la adjudicataria es el apoyo a grupos, entidades y colectivos para el desarrollo de proyectos e iniciativas “que sean de especial interés y que sintonicen con las demandas y las necesidades de la población, estimulando el trabajo conjunto y la cooperación entre los diferentes agentes”. En este sentido, además del apoyo logístico, técnico y de infraestructura, han de fomentar el trabajo en red, estimular la programación de actividades y colaborar en el calendario festivo del barrio desde el centro cívico de Sarrià, tanto en las fiestas mayores de los barrios del distrito como en las fiestas cíclicas, como Carnaval, Navidad, cabalgata de Reyes o la castañada. Vil·la Florida, por su parte, ha de participar en la fiesta mayor del barrio y en 3 acontecimientos del calendario festivo tradicional o en días singulares.

También se prevén un mínimo de 50 espectáculos anuales (que pueden ser en las salas del centro o en otras localizaciones), 9 conferencias al año y 10 exposiciones en el caso del centro cívico de Sarrià, mientras que Vil·la Florida ha de programar un mínimo de 40 espectáculos y 20 actividades (que pueden estar incluidas en ciclos), 10 exposiciones al año, 10 conferencias y 10 actividades y espectáculos y 20 talleres anuales para niños. Para ancianos, se prevén 12 talleres trimestrales.