Jordi Bea, consejero de Ciutadans en Gràcia, ha dejado el Ayuntamiento de Barcelona. La marcha de Bea coincide con una crisis del partido naranja a nivel estatal y municipal, pero en este caso la salida se debe a razones puramente profesionales, han confirmado distintas fuentes a este medio.
Según el grupo municipal de Ciutadans, Bea tiene nuevas responsabilidades en su trabajo y no se puede dedicar al 100 por 100 a su labor como consejero. La formación anunciará en los próximos días la persona que le sustituirá.
MARCHA DE MARILÉN BARCELÓ
La caja de los truenos en Ciutadans explotó a finales de mayo con la marcha de la regidora Marilén Barceló, que dejó el grupo municipal por malas relaciones con la presidenta de la formación en el Ayuntamiento Mariluz Guilarte. "Me voy por discrepancias con el liderazgo y con la coordinación con el grupo municipal", declaró.
La crisis de Ciutadans se ha acrecentado con los malos resultados en las elecciones catalanas -con solo seis diputados después de que Inés Arrimadas ganara las autonómicas de diciembre de 2017- y de la comunidad de Madrid, donde Ciudadanos no consiguió representación el pasado 4 de mayo. En el camino se ha dejado 26 diputados.
CESADOS DOS CONSEJEROS
En el caso de Barcelona, y antes de la marcha de Barceló, Guilarte cesó a dos consejeros de distrito, Pedro Miret y Jordi Obón. Ambos fueron despedidos a finales de febrero y acusaron al partido naranja de haber sido expulsados por ser críticos tras los malos resultados electorales. La formación respondió que la salida de éstos se debió a cambios organizativos y que la decisión hacía meses que se había tomado. Con posterioridad, el 3 de mayo, Guilarte despidió a otro consejero de distrito, Rafael Yepes.