El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha anunciado la prohibición de la publicidad dirigida al publico infantil de dulces, galletas, helados, bebidas calóricas y resto de productos alimenticios ricos en sales, azúcares y grasas considerados nocivos para la salud por la Organización Mundial de la Salud.
Garzón ha explicado que la regulación estatal de esta publicidad de los alimentos dirigida a menores de 16 años en televisión, radio, redes sociales, webs, aplicaciones móviles o cine se hará por real decreto y se empezará a aplicar el año próximo.
REGULACIÓN DE LA PUBLICIDAD
En televisión, la nueva normativa afectará a los horarios de protección reforzada y a los espacios publicitarios de programas dirigidos al público infantil y a los canales de televisión dirigiros a menores de 16 años. Además, el real decreto también regulará los contenidos radiofónicos, salas de cine y publicidad en internet, redes sociales, webs o aplicaciones móviles cuando estén dirigidos a menores de 16 años e incluirá limitaciones en los medios impresos.
ALIMENTOS NOCIVOS
En la linea de las regulaciones de esta publicidad que han hecho Reino Unido, Portugal y Noruega, el ministro ha explicado que la normativa impedirá hacer publicidad a menores de las cinco categorías de productos que la OMS considera nocivos.
Son las de productos de confitería de chocolate y azúcar, barritas energéticas y coberturas dulces y postres; la de alimentos que incluye pasteles, galletas dulces y el resto de productos de bollería, y las de zumos, bebidas energéticas y los helados.
Para el resto de categorías de productos se establece un límite de contenido de nutrientes por cada 100 gramos y se podrán anunciar siempre y cuando las grasas totales y saturadas, el azúcar total y añadido o bien los niveles de sal se mantengan por debajo de aquellos que se establece para cada producto.
SOBREPESO Y OBESIDAD
Garzón, que ha hecho este anuncio en rueda de prensa en Barcelona, tras reunirse con la alcaldesa de la capital catalana, Ada Colau, ha explicado la decisión de pasar a la regulación directa de la publicidad de alimentos y bebidas dirigidas al publico infantil en la "ineficacia" para rebajar la obesidad y el sobrepeso infantil del Código de autorregulación PAOS establecido por la propia industria, que se aplica desde 2005 en España.
"El sobrepeso y la obesidad tienen unos niveles extraordinariamente altos y es un deber público rebajarlos", ha subrayado Garzón, que ha destacado entre "las cifras alarmantes" del informe Aladino que el 23% de los niños españoles de entre 6 y 9 años tienen sobrepeso y el 17% sufren obesidad.