El accidente que tuvo lugar esta diada de Sant Jordi al caer una carpa de la superilla literaria sobre una persona ha puesto a editores y libreros en contra del Ayuntamiento. El sector del libro ha reprochado al consistorio la carencia de previsión.
El temporal no solo afectó a dos personas, que quedaron heridas, sino que golpeó a más transeúntes y arruinó las paradas de las librerías y editoriales. Ante el fatídico accidente, el teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí, ha respondido que “no es posible prever un plano B en Barcelona tal como sucedió en otros ciudades más pequeñas”, como por ejemplo Girona. A lo que ha culpabilizado al viento de lo sucedido afirmando que la ciudad ha vivido otras fiestas con lluvia y que, no se había experimentado con esta “virulencia”. Asimismo, ha insistido que el consistorio ayudará los afectados por las pérdidas.
MARTÍ QUITA HIERRO
Martí ha explicado que el Ayuntamiento de Barcelona cree que "Sant Jordi resistió" y tuvo "momentos espectaculares”. Tras quitar hierro al asunto ha confirmado que “algunas personas quedaron afectadas”. Por eso, en los próximos días, confirma que analizarán la situación con el Gremio de Libreros, librerías y editoriales.