El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) investigó el Ayuntamiento de Barcelona. Tras el triunfo de ERC en las elecciones municipales del 2019, en las que ganó en número de votos, al espionaje español le empezó a preocupar que el partido de Ernest Maragall alcanzara la alcaldía, según ha avanzado La Vanguardia.
Aunque finalmente el pacto entre BComú, de Colau, y PSC alejó esa posibilidad, hubo una persona de los 18 relacionados con el procés que fue espiada por su conocimiento sobre las negociaciones de los comicios en la capital catalana.
Ada Colau, Jaume Collboni, Ernest Maragall y Elsa Artadi, en enero de 2020 / EUROPA PRESS
ÁMBITO INDEPENDENTISTA
La escucha es una de las intervenciones que el CNI admite haber realizado a personas del ámbito independentista. La que era la directora, Paz Esteban, expuso en la comisión del Congreso los objetivos fijados en la Directiva de Inteligencia vigente en España. En ella se mencionan las “campañas del independentismo” como uno de estos objetivos. Además, Esteban citó también la lucha contra el yihadismo.
El CNI tenía especial interés en movimientos como Tsunami Democràtic o los Comités de Defensa de la República. Los describe como "estructuras jerárquicas y con gran capacidad de movilización". Las 18 personas que los servicios secretos admiten haber espiado son: Pere Aragonès, Jordi Sànchez, Elsa Artadi, Carles Riera, Elisenda Paluzié, Marcel Mauri y el abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye. También Joan Matamala, Sergi Miquel, Josep Lluís Alay, Xavier Vendrell, David Bonvehí, Marc Solsona, Jordi Baylina, Xavier Vives y Pau Escrich.
"DEMOCRACIA INTERVENIDA"
En declaraciones a Catalunya Ràdio, Maragall ha asegurado que Valls fue "un juguete más" en el marco de la "operación de Estado" que pretendía evitar que ERC recuperara la alcaldía de Barcelona.
"Estamos en una democracia intervenida", ha sentenciado el dirigente republicano, que deplora que desde instituciones estatales se vea como un "riesgo" la posibilidad de que ERC gobierne. A su juicio, la información sobre el espionaje del CNI a ese presunto intermediario, cuya identidad no ha querido revelar, "afecta muy gravemente a la legitimidad y a la validación democrática" de lo sucedido tras las elecciones municipales de 2019.
El líder de ERC en Barcelona, Ernest Maragall / ERC
EL CNI SE DISTANCIA DE PEGASUS
Esteban aseguró que el CNI solo espió con autorización judicial a esas 18 personas mencionadas. Nada que ver con los 65 independentistas infectados con Pegasus o Candiru, dos softwares israelíes detectado por Citizen Lab.
La exdirectora del CNI apunta a servicios extranjeros como los marroquíes o los rusos como autores de la infección.