El Ayuntamiento de Barcelona aplica desde este 1 de julio 2,5 euros de tasa a los autocares turísticos. Solo la cobra a los vehículos que realizan paradas breves en las que sus usuarios pueden subir y bajar para visitar zonas de gran afluencia como la Sagrada Familia, Ciutat Vella o el Park Güell.
En un comunicado este lunes, el consistorio ha explicado que, con esta medida, busca contribuir a reducir el impacto que tienen en la movilidad de Barcelona los autocares turísticos. De este modo, según el consistorio, también se garantizará que hacen un buen uso de las 35 áreas conocidas como Zona Bus donde pueden realizarse este tipo de paradas y que cuentan con 162 plazas.
ORDENANZA SOBRE EL ESTACIONAMIENTO
Como ya pasaba hasta ahora, estas paradas próximas a puntos de alto interés turístico no pueden durar más de 10 minutos y hay que registrarlas en la app metropolitana para conductores profesionales SPRO, que permite realizar el pago de la tasa. El Ayuntamiento, a través de la empresa pública Barcelona de Serveis Municipals (B:SM), asegura que cumple así la ordenanza fiscal sobre el estacionamiento regulado de vehículos en la vía pública.
Tal como marca la propia regulación, los ingresos obtenidos con la aplicación de esta tasa se destinarán a financiar actuaciones que impulsen la movilidad sostenible.