Nueva crisis en Ciutadans. El partido naranja ha ejecutado el expediente disciplinario que pesaba sobre el concejal Paco Sierra y lo ha expulsado del partido. La gota que ha colmado el vaso ha sido que Sierra ha echado a los consejeros de distrito Sonia Reina (Les Corts), Javier Edrosa (Sarrià) y Arturo Carrasco (Gràcia), según ha podido saber Metrópoli de Ciutadans.
El grupo naranja ya anunció este miércoles que se habían roto las negociaciones entre Sierra y la dirección debido a una, explicaban, actitud "obstruccionista" por parte del concejal expedientado. Asimismo, aseguraban que Sierra mantenía conversaciones con otros partidos en el consistorio barcelonés de cara a las próximas elecciones electorales, sugiriendo que no cerraba la puerta a presentarse a los comicios en otras listas.
Sobre Sierra pesaba hasta hoy un expediente disciplinario por haber organizado un golpe de estado contra la hasta hace unas semanas líder en el consistorio, Luz Guilarte, que sí fue cesada como líder municipal. Tras el suceso, Guilarte renunció a ser regidora ser alcaldable por Ciutadans. La maniobra se hizo, además, sin el apoyo de la dirección del partido, que respaldó a la hasta entonces presidenta del grupo en el Ayuntamiento de Barcelona.
Sierra registró "un escrito en el consistorio con el que pretende autoproclamarse presidente y cambiar así la configuración del grupo". "A raíz de esta operación hecha a espaldas de la dirección de Ciutadans y después de tener noticia de que Sierra había intentado integrarse en las listas electorales de otras formaciones de cara a los próximos comicios municipales de 2023, la dirección del partido decidió iniciar el proceso de expulsión de Sierra", explicaron los naranjas en un comunicado.
UN FUTURO INCIERTO
Tras el seísmo sufrido durante las últimas semanas, queda por ver cuál será el futuro de la formación, que se muestra incierto a tan solo medio año de las próximas elecciones municipales. Y es que C's en Barcelona está formado por tres concejales: Paco Sierra, Noemí Martín y Julia Barea. Las dos concejalas, además, mantienen una estrecha relación con Sierra.
Tras su expulsión, Sierra tendrá que dejar la presidencia del grupo municipal y pasará a ser concejal no adscrito si quiere seguir en el Ayuntamiento, han explicado fuentes municipales a Metrópoli. Todavía tiene 48 horas para recurrir al tribunal de Garantías, que podría decidir instantáneamente. Fuentes internas del partido explican, al respecto, que la situación es clara, sobre todo tras el cese "arbitrario y sin motivo" de los consejeros de distrito, explican desde el partido.
Si Barea y Martín decidieran dejar el partido en señal de protesta, el grupo municipal de C's en el Ayuntamiento de Barcelona desaparecería. Los tres regidores pasarían a ser no adscritos y la formación perdería los asesores contratados y la asignación económica que el Gobierno de España otorga a los partidos.
NUEVO LIDERAZGO
Durante las reuniones mantenidas en las últimas jornadas, el partido propuso a Sierra "volver a las dinámicas anteriores" al golpe de estado y, a cambio, Sierra debería ceder la presidencia a Julia Barea. Sierra no estuvo de acuerdo. Por el momento, las fuentes consultadas explican que el nombre de Barea sigue sonando para liderar a la formación en la capital catalana. Sin embargo, ella tendrá la última palabra en función de la actitud que mantenga los próximos días, es decir, si decide no abandonar la formación.
"Lo que nos importa es gestionar (esta crisis) rápido y ponernos a trabajar en la nueva candidatura", han sentenciado.