Partidas acordadas, con recursos para este año y durante todo el mandato. El PSC propuso un paquete de medidas con los comunes, con la inclusión de “hasta el 90%” de sus peticiones que ahora se quedarán en nada, porque el partido de Ada Colau votará este viernes en contra de los presupuestos que defiende el alcalde Jaume Collboni para 2024. Será en el pleno del Ayuntamiento, con el argumento, por parte de los comunes, de que Collboni no ha querido un gobierno de coalición, con la presencia, en el equipo municipal, de la propia Colau. En el tintero hay 300 millones de euros a lo largo de todo el mandato.
El PSC entiende que esa es la principal causa de que el presupuesto no salga adelante este viernes, a menos que en las horas que faltan hasta el pleno haya algún cambio, producto de una negociación de urgencia. Lo tangible, lo que se ha podido conocer, según fuentes socialistas, es que hubo una propuesta, en la primera semana de marzo, que incluye buena parte de las medidas que defendían los comunes.
Ada Colau junto a sus compañeros de partido en un acto durante la campaña electoral del 28M en Barcelona
En el presupuesto se incluía partidas por una cuantía de 90 millones de euros para 2024, y 300 para el conjunto del mandato. Las medidas se incluyen en distintos ámbitos. En Vivienda y en gestión del turismo, áreas clave para los comunes, el gobierno municipal se comprometió, en esa propuesta de acuerdo, en una inversión de ocho millones para 2024 y de 27 millones para todo el mandato, con la idea de destinarla a la compra de edificios residenciales para destinarlos al alquiler.
Partidas para paliar los cruceros
También se incluyó la rehabilitación de viviendas en la zona del Besòs-Maresme, como el compromiso, “como mínimo” de llegar a 500 viviendas rehabilitadas, y con una partida de siete millones en 2024 y de 30 millones para todo el mandato.
Otra de las cuestiones, polémica, es la reserva del 30% de vivienda protegida, pero “haciéndola eficaz”. Eso supone cambiar lo que había defendido el partido de Ada Colau. Collboni defiende el mismo porcentaje de vivienda protegida, pero a través de monetizar ese porcentaje, sin la obligación de que los promotores lo plasmen en cada una de las promociones.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en el acto del DHUB
Una medida importante para los comunes es la gestión de la llega de cruceros, para reducir el número de cruceros de escala, favoreciendo los de puerto base. Y con el objetivo de aumentar el recargo municipal en 0,75 euros, hasta llegar a los cuatro euros, el máximo legal, para los visitantes procedentes de cruceros de corta estancia.
Como el Hard Rock
Los comunes han insistido en que debe haber un gobierno municipal progresista, y el guante lo ha recogido Jaume Collboni, con una idea directa: "primero las políticas, luego las sillas". ¿Y las políticas estaban recogidas? Fuentes socialistas insisten en que los deberes estaban hechos, con partidas en la transformación verde de la ciudad o con medidas sobre derechos sociales, salud, educación y cultura. Las principales líneas rojas de los comunes están fijadas en la propuesta de acuerdo de principios de marzo. Pero en la votación, en el pleno de este viernes, el partido de Colau se inclinará por el 'no'.
Para los socialistas el caso es similar a lo que ha sucedido en el Parlament de Catalunya. Los comunes votaron en contra del presupuesto de la Generalitat con el argumento de que no se ha rechazado el proyecto del Hard Rock, en Tarragona, a pesar de que no se había consignado "ni un solo euro" en las cuentas de 2024.