El Ayuntamiento de Barcelona quiere instalar 500 nuevas cámaras de seguridad en las calles de la ciudad y dotar a la Guardia Urbana de 20 pistolas eléctricas adicionales. Así lo ha anunciado en una entrevista a SER Catalunya el Teniente de alcalde de Seguridad del consistorio, Albert Batlle.
Según ha explicado Batlle, la ciudad cuenta con un total de 120 cámaras de vigilancia, una cantidad que ha considerado "insuficiente". Batlle ya se había manifestado en agosto a favor de incrementar la cantidad de estos dispositivos de seguridad en una ciudad como Barcelona.
Instalar en las calles con más delitos
El consistorio quiere con esta medida incrementar la seguridad en aquellos lugares donde se han producido más hechos delictivos. "La voluntad es incrementar su número allí donde hay más concentración de delitos", ha asegurado. Además, ha vuelto a poner el foco sobre la multirreincidencia y ha pedido más recursos para combatirla.
Agentes de la Guardia Urbana de Barcelona en una imagen de archivo
Pese a la voluntad del Ayuntamiento, la medida debe ser aprobada previamente por la comisión de control de los dispositivos de videovigilancia, que está bajo el control del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), que garantiza que el sistema cumpla con todas las garantías respecto a la población.
La nueva ordenanza de circulación
Batlle ha hablado también de la nueva Ordenanza de Circulación de Barcelona. El Teniente de alcalde de Seguridad se ha mostrado confiado en poderla sacar adelante próximamente.
De hecho, la nueva ordenanza se encuentra a un paso de su aprobación definitiva. BComú y ERC han expresado su disposición a apoyar la reforma, que lleva pendiente desde el mandato anterior, siempre y cuando se incluyan medidas claras para fomentar el uso de la bicicleta en la ciudad.