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Resolver el problema de la vivienda. Esa es la petición que Jaume Collboni ha hecho a los países del G-20 que se reunirán a partir del próximo lunes, 18 de noviembre, en Río de Janeiro

En concreto, Barcelona ha pedido implementar reglas y fondos específicos para facilitar el acceso a la vivienda. Estas peticiones han sido incluidas en el documento que los 87 alcaldes reunidos en Río entregarán al jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, para que, en su calidad de presidente temporal del G20, lo eleve a la Cumbre de las mayores economías del mundo.

Un problema mundial

Collboni ha recordado que se trata de un problema que afecta a las principales grandes ciudades de todo el mundo. "La vivienda es un problema global de todas las grandes ciudades del mundo, del sur global, pero también de los países europeos occidentales", ha asegurado.

Además, el alcalde de la capital catalana ha denunciado que los elevados precios afectan y expulsan de las ciudades a las personas más vulnerables. "El acceso a la vivienda es hoy una de las principales fuentes de desigualdad en las grandes ciudades. Los precios de alquiler en Europa aumentaron un 50 % en los últimos diez años y en mi ciudad un 70 %", ha asegurado. "Eso supone expulsar a la población, sobre todo la gente joven, gente trabajadora y gente de la clase media", ha añadido.

Turistas abandonando un piso en una imagen de archivo EFE/MANUEL BRUQUE

Más recursos y control

"Tenemos necesidad de dos cosas, que es lo que planteamos en estos foros internacionales", ha afirmado el alcalde de Barcelona, que ha pedido más poder de regulación. "Por un lado, la capacidad reguladora de las ciudades, es decir, que podamos regular el mercado de la vivienda desde el sector público, y también necesitamos acceso a fondos que en este momento se están articulando a nivel de los estados".

Afirmó que Barcelona, ya ha implementado una norma para regular los precios de alquiler, que está permitiendo desacelerar su subida, y otra para suprimir completamente, a partir de 2028, los pisos turísticos que son ofrecidos por algunas plataformas de alquiler de vivienda temporal.

El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni EUROPA PRESS

Más vivienda pública

Además, Collboni ha propuesto que "la capacidad de endeudarse que tengan las administraciones para hacer vivienda pública no compute en las reglas fiscales de la Unión Europea, es decir, que, si en los próximos años se vuelve a limitar la capacidad de endeudamiento de las administraciones, la vivienda sea una excepción".

Es por eso, que ante la necesidad de elevar la oferta de vivienda y hacerla más asequible, también ha pedido fondos que puedan ser ofrecidos por los gobiernos nacionales o por organismos multilaterales.