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Hay algo peor que caer bajo fuero enemigo: ser víctima de fuego amigo, el que proviene casi de las propias filas.

Eso es lo que le puede pasar a los comunes en las próximas elecciones, ya sean municipales, autonómicas o generales. Sus antiguos socios, Podemos, preparan una ofensiva en toda regla para disputar el electorado de la izquierda radical a Barcelona en Comú (BeC) en su feudo más importante: la capital catalana.

La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau EFE

A los de Ada Colau, las balas les llegarán desde sus rivales más directos, como ERC, la CUP o el propio PSC. Pero también desde sus filas, donde Podemos, que disputa el mismo nicho electoral, quiere arrebatarle fuerzas.

En otras palabras, Podemos quiere acabar lo que comenzó: desarbolar a los comunes y disputarles a cara de perro la parcela electoral en Catalunya, comenzando por Barcelona.

A por el sorpaso

Las últimas elecciones europeas, celebradas el año pasado, fueron un experimento y a los de Pablo Iglesias le salió bien: Podemos ganó en Cataluña a Sumar al conseguir 110.175 votos frente a los 102.831 de los comunes encabezados por Jaume Asens.

Esto ha dado alas a los podemitas, que quieren dar el sorpaso en las municipales y las autonómicas. Con un Sumar en horas bajas, Podemos ve una grieta por donde clavar una puñalada a sus antiguos aliados.

María Pozuelo en una entrevista EUROPA PRESS

Bajo la batuta de María Pozuelo, coordinadora general en Catalunya, los podemitas están empezando a minar la credibilidad de los comunes y de sus también cordiales enemigos de Sumar.

Su situación es muy cómoda: sólo han de elevar la crítica y situar a los comunes en las inmediaciones del Gobierno para impregnarlos con los mismos reproches que realizan hacia los socialistas, a quienes deben robar una parte del electorado para crecer.

Las odiosas comparaciones

Pero Podemos no se limita a la crítica llana. Afina una estrategia que asimila a Sumar y a los comunes al desgaste del PSOE de Pedro Sánchez. Y en Catalunya está comenzando a tomar la iniciativa en algunos sectores para competir directamente en el terreno de juego con las consignas de los de Colau.

María Pozuelo (Podemos) en declaraciones a medios EUROPA PRESS

En algunos temas, pisa a los comunes con sus propios argumentos y los coloca frente a un espejo. Así, pule su discurso en los temas sensibles que hasta ahora habían sido patrimonio de BeC, como el de la vivienda, el reducto estrella de Colau.

Ahora, los podemitas quieren vincular el supuesto fracaso en materia de vivienda pública al eje socialistas-comunes.

“La ocupación, como dice Junts cual mantra de la extrema derecha, y que ahora compra el Gobierno de PSOE-Sumar, no es el problema. Es el precio desorbitado de la vivienda y su falta de regulación pública. ¿A qué espera el Gobierno de PSOE-Sumar para prorrogar indefinidamente la moratoria de los desahucios? Miles de familias viven estos días una angustia inhumana”, acusaba Pozuelo hace unos días.

Robar el discurso de Colau

En un encuentro con militantes este lunes, Pozuelo afirmaba que “Catalunya encabeza los precios de vivienda más altos del Estado. Los fondos buitre campan a sus anchas, los pisos turísticos se multiplican y los gobiernos que hemos tenido todos estos años han preferido plegarse ante intereses privados antes que defender el derecho a una vivienda digna"

Continuaba: "La vivienda es un derecho, no un negocio. Y esto no se arregla con llamamientos a los fondos buitre ni pidiendo solidaridad a los caseros. Se arregla interviniendo el mercado, con regulación de precios, con prohibición de la especulación, con incremento del parque público y con medidas antidesahucio”.

Ada Colau durante el acto sobre la amnistia de SUMAR Luis Miguel Añón

Es algo así como robar el discurso a Colau, pero con caras nuevas y bríos renovados. El fuego amigo de Podemos a sus competidores de izquierdas es continuo.

La líder morada en Catalunya vaticina que “esta legislatura caerá por los principales problemas que tiene la gente: vivienda, precios de los alimentos, de la energía y el transporte”. Se trata de poner énfasis en temas de debate popular en los que pueden realizar un discurso desacomplejado.

Un torpedo a la exalcaldesa

Y lanza torpedos a la línea de flotación de Colau. A pesar de que la exalcaldesa patrimonializó su presencia en la Flotilla de Gaza, Podemos le saca los colores en cuanto puede, apuntando a una pose política.

Los de Iglesias no dudan en acusar a sus exsocios de permitir el “genocidio de Gaza”, ya que ni PSOE ni Sumar hacen nada por tomar “medias contundentes y reales contra el Estado genocida de Israel”.

La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, rumbo a la Flotilla que salió a Israel EUROPA PRESS

En Cataluña, mete el dedo en el ojo en temas como la pobreza infantil o la saturación del sistema público sanitario. “PSC, con el apoyo de ERC y de los comunes nos está matando”, advertía este jueves María Pozuelo, un dardo al corazón de Colau presentando a BeC como un apéndice del sistema y de los socialistas.

Contra la matanza de jabalíes

Otro tema en el que ha pasado la mano por la cara a los comunes es el de la crisis de la peste porcina africana.

Aunque pueda parecer una tontería, Podemos se puso al frente de las protestas por la “matanza indiscriminada” de jabalíes. En un momento de especial sensibilidad con el tema del sector cárnico, tomar la iniciativa en un debate que ha bajado hasta la calle es importante. Y Pozuelo no ha perdido comba, ganándole la carrera a Colau ante la opinión pública.

En definitiva, Podemos tiene muy claro que hacer copartícipes a los comunes de las políticas aplicadas tanto desde Madrid como desde Barcelona le puede dar unos resultados óptimos con el mínimo esfuerzo.

La batalla por el pastel electoral ya ha comenzado. Y los de Colau lo tienen cada día más difícil para contrarrestar unos argumentos que se les atragantan a cada nueva andanada de los morados.

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