Un ruido estremecedor. Sobresalta. Quita el sueño e impide llevar una vida normal. Así describen fuentes vecinales el zumbido constante de los camiones que entran y salen del Camp Nou a Metrópoli. La apertura parcial del nuevo estadio se aproxima y los obreros lo saben bien: finales de febrero, según fuentes del F.C.Barcelona.
Como también saben que el campo completo debería estar operativo en agosto de 2026. Y de no ser así, le costará a la empresa constructora un ojo de la cara, lo que, según denuncian las mismas fuentes, está llevando a los operarios a "excederse del horario permitido para los trabajos".
Tal y como explicó Culemanía, el contrato que ha firmado el Barça con la empresa constructora contempla tres garantías para asegurar la finalización de las obras en el plazo. Una de ellas es la indemnización de un millón de euros por cada día de retraso sobre la fecha prevista para la finalización de la obra.
Cumplir con la fecha de entrega
"Acaban cuando quieren para ganar tiempo y cumplir con la fecha de entrega", aseguran los vecinos. La normativa municipal establece que la maquinaria pesada, como las hormigoneras, solo puede utilizarse de lunes a viernes, de 08:00 a 20:00 horas.
Fuera de este horario, solo se permiten actividades que no generen ruido. Sin embargo, algunos residentes afirman que esta regulación no se respeta. Como ejemplo, citan lo ocurrido este pasado miércoles 20 de noviembre, cuando "camiones entraban y salían haciendo ruido más allá de las 21:00 horas".
Las molestias persisten
Aunque las fuentes vecinales reconocen que la situación ha mejorado respecto a los meses de verano y octubre --cuando en varias ocasiones los trabajos se extendían hasta la medianoche--, lamentan que aún se produzcan excesos en días puntuales. "Incluso comienzan antes de las 8:00 y, de verdad, molesta mucho", protestan.
"No es tan grave como antes, pero la contaminación lumínica de las máquinas y el ruido siguen siendo un problema. No se respetan del todo los horarios", señalan. "Queremos que las obras terminen lo antes posible, pero no a costa de estas molestias", añaden.
Los mismos testimonios también expresan su preocupación por los daños causados a los árboles durante las obras. "En la Travessera de les Corts se están descargando vigas de acero mientras una parte de la acera permanece cortada, y las grúas están arrollando las ramas de los árboles al maniobrar", señalan.
Vigilancia policial
Fuentes municipales aseguran a este medio que en todo momento hacen un seguimiento de las quejas recibidas y se tratan en las reuniones mensuales con los vecinos y el FC Barcelona.
En este sentido, desde octubre se acordó la presencia de la Guardia Urbana por la noche en la zona para velar por el cumplimiento de los horarios establecidos en la licencia actual.
División vecinal
Otros testimonios vecinales, en cambio, aseguran a Metrópoli que la situación está actualmente bajo control y que la Guardia Urbana ha intensificado la vigilancia en las obras.
"Una patrulla pasa por la mañana y otra después de las 20:00 para supervisar a los trabajadores", explican. Este acuerdo se alcanzó tras una reunión el pasado 18 de noviembre entre los residentes y la concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona, en la que también participaron representantes institucionales del Barça.
Disuelto el miedo a 'un Bernabéu'
En la reunión también se trató la posibilidad de que el estadio albergue conciertos, una de las principales inquietudes de los vecinos tras la polémica generada en el Bernabéu.
En el estadio madrileño se celebraron varios espectáculos que desataron el malestar de los residentes debido al ruido excesivo y al desorden. No solo los conciertos, que a menudo se extendían hasta la madrugada, fueron un problema, sino también los montajes, ensayos y la gran afluencia de público, que superaban los límites permitidos de ruido.
En este sentido, los vecinos de Les Corts se sienten aliviados, ya que en la reunión el Barça confirmó que no habrá espectáculos en el Camp Nou. Solo se permitirán uno o dos eventos, y únicamente cuando no coincidan con la temporada de partidos, aprovechando los periodos en los que el club deba cambiar el césped.
Vuelven los sábados
Tras la comitiva, el distrito de Les Corts ha vuelto a autorizar que las obras se realicen también los sábados de 10:00 a 20:00 horas. El Ayuntamiento ya había permitido trabajos en fin de semana anteriormente, pero retiró el permiso tras las quejas vecinales.
Las tareas podrán extenderse hasta la medianoche, siempre que a partir de las 20:00 horas no se genere ruido ni contaminación lumínica.
Los obreros continúan su trabajo y los vecinos, mientras, deseando que lleguen a su fin. Todo para que en febrero la primera y segunda gradería estén operativas, aun al descubierto, con un aforo limitado a 64.000 espectadores.