El nuevo Bicing funcionará las 24 horas del día, permitirá reservar bicicletas hasta cinco minutos antes y se podrá utilizar con la nueva tarjeta T-Mobilidad. Estas son algunas de las novedades que sufrirá el servicio con la llegada de la filial de Ferrovial a la gestión.
La nueva empresa gestora del servicio se ha comprometido a renovar toda la flota de bicicletas, manteniendo las 6.000 mecánicas actuales y aumentando de 300 a 1.000 en el caso de las eléctricas. En este sentido, se mantiene la opción de aumentar la flota en 1.000 bicicletas más, hasta las 8.000, y de sustituir modelos mecánicos por eléctricos.
Nuevo modelo de Bicing, presentado por 'Pedalem Barcelona'/AJUNTAMENT
Todas las bicicletas, tanto las mecánicas como las eléctricas, tendrán el mismo chasis, a diferencia de lo que ocurre ahora. La única diferencia entre ambas será el pequeño motor de 250W que incorporarán las eléctricas integrado en la rueda trasera. Por otro lado, además de la tarjeta personal, la APP y los teléfonos móviles con tecnología NFC permitirán desbloquear la bicicleta del anclaje.
CAMBIO DE CONCESIONARIA
Todos estos cambios dependen de que la comisión de Movilidad confirme el martes el cambio de la concesión propuesto por el gobierno del Ayuntamiento de Barcelona. La UTE 'Pedalem Barcelona', formada per CESPA y PBSC, es la elegida por el equipo de Colau para asumir la gestión del bicing durante la próxima década.
'Pedalem Barcelona' se ha impuesto a la actual gestora del servicio, Clear Channel, que había gestionado el bicing desde su nacimiento y que contaba con mejor nota en la valoración técnica, pero por poca diferencia respecto a 'Pedalem Barcelona', que ha presentado una oferta económica muy inferior, de 149,6 millones de euros, cuando el concurso se había licitado en 227 millones. En total, se presentaron seis candidaturas al concurso, pero sólo estas dos habían pasado el corte.
Nuevo modelo de Bicing, presentado por 'Pedalem Barcelona'/AJUNTAMENT
El proceso de cambio de concesionaria ha estado envuelto en polémica, después de que los trabajadores denunciaran las pésimas condiciones laborales que sufrían y pidieran que se garantizaran sus puestos de trabajo con la nueva empresa. Para ello, convocaron una serie de jornadas de huelga hasta alcanzar un acuerdo con el Consistorio.