El aeropuerto de El Prat se va a la huelga
El personal de tierra parará los días de inicio de las vacaciones de agosto
6 julio, 2018 13:29Noticias relacionadas
Vuelve un clàsico del verano, la huelga en el aeropuerto de El Prat. Y lo hace en los días en los que está previsto que haya un mayor movimiento de pasajeros en los pasillos de la instalación, ya que la convocatoria ha sido hecha para los dìas en los que mucha gente empieza sus vacaciones de verano, en el inicio del mes de agosto.
De hecho, la huelga convocada por el personal de tierra del aeropuerto barcelonés afectará al último fin de semana de julio y al primer fin de semana de agosto. El Comité de Empresa de Iberia Barcelona ha convocado sendos paros para los días 27 y 28 de julio y 3 y 4 de agosto. Coinciden con dos viernes y dos sábados con una semana de diferencia, y que coinciden con salidas y llegadas masivas de pasajeros a la instalación.
El principal motivo argumentado por los sindicatos es la falta de respuesta de la dirección de la empresa a sus peticiones de contratación de más personal para acabar con la sobrecarga laboral que lleva soportando la actual plantilla desde hace mucho tiempo. La llegada de los meses de verano y el aumento significativo de viajeros en el aeropuerto supone un enorme aumento de la carga de trabajo, lo que implica, entre otras cosas, que los trabajadores se ven obligados a hacer muchas horas extraordinarias para lograr un funcionamiento perfecto de la instalación aeroportuaria.
Además, los trabajadores también quieren mostrar su rechazo al hecho de que la empresa mantiene paradas las negociaciones para la entrada en funcionamiento de un nuevo convenio colectivo.
COLAS Y PACIENCIA
Con esta convocatoria de huelga del personal de tierra del aeropuerto se prevé que sean muchas las personas que empiecen sus vacaciones haciendo largas colas en las terminales de El Prat. Y, como cada vez que se produce una convocatoria de estas características, el consejo más habitual es el de llegar con tiempo suficiente, y con una buena carga de paciencia, a la terminal para evitar prisas de última hora o pérdida de vuelos, con todo lo que eso supone en el inicio de las vacaciones.