El pleno municipal de Barcelona ha aprobado la conexión del tranvía por la Diagonal. Pero la propuesta sometida a votación es, por ahora, solo humo. A cuatro meses de las elecciones, el gobierno de Ada Colau ha cogido aire de cara a los comicios de mayo con un brindis al sol. La propuesta ratificada carece de proyecto, calendario y presupuesto. Antes de las elecciones no se pondrá ni una sola piedra, tampoco en lo que quedará desde julio hasta finales de año.
La unión del tranvía por la Diagonal ha recibido los votos a favor de Barcelona en Comú, ERC, PSC, CUP y los concejales no adscritos, Juanjo Puigcorbé y Gerard Ardanuy, mientras que PDeCAT, Ciutadans y PP se han posicionado en contra. El propio secretario del Ayuntamiento, el funcionario Jordi Cases, ha aclarado al inicio del debate que este viernes "no se aprueba ningún proyecto".
SOLO DECLARACIÓN DE INTENCIONES
La proposición ratificada es únicamente una declaración política, una declaración de intenciones. Aunque el PSC ha votado a favor, el regidor socialista, Daniel Mòdol, ha recriminado al gobierno municipal que se está dando un paso atrás y que se irá del pleno "con un gusto amargo". "Invito a los regidores contrarios a votar a favor. No se comprometen a nada". Si el proyecto finalmente se ejecuta, en primer lugar se hará entre Glòries y la plaza de Jacint Verdaguer e irá acompañado de una reforma de esta parte de la Diagonal para revitalizarla comercialmente. Ambas ideas son del PSC.
La teniente de alcaldía, Janet Sanz, ha asegurado que Barcelona quiere un tranvía y ha defendido que la propuesta aprobada responde a una demanda de la ciudadanía. Según Sanz, el acuerdo plantea construir el tranvía por la Diagonal en superficie y que este medio de transporte sea 100% público y gestionado por un operador público, en este caso Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB). La intención del Ayuntamiento es que las obras puedan empezar lo antes posible, aunque sin proyecto, calendario ni presupuesto, y con las elecciones en medio, la iniciativa no invita al optimismo. El gobierno incluso ha retirado de la propuesta empezar las obras en 2020. Sanz ha reiterado que si se quiere que el tranvía sea una realidad en esa fecha, lo será. "Este es el objetivo y esta es la voluntad".
DESHACER UN NUDO
ERC ha sido el partido que ha permitido aprobar la propuesta. El pasado abril, los republicanos votaron en contra. Desde entonces, el partido ha cambiado de líder -Alfred Bosch por Ernest Maragall-, pero según el concejal Jordi Coronas que hayan apoyado la iniciativa del gobierno no significa un cheque en blanco a Colau. "Hemos deshecho un nudo", ha subrayado Coronas. "Queremos poner rigor a la propuesta para sacarla adelante". Coronas ha puesto como ejemplo que cuando se dice que la gestión será totalmente pública, ERC quiere saber cómo se hará. Por ahora, Colau no lo ha explicado. Rescatar la concesión del Trambesòs y Trambaix antes de 2032 puede costar unos 400 millones. Para Maragall, el planteamiento planteado por Colau "es escaso y mezquino, y ahora queremos un planteamiento global".
La medida aprobada comunica formalmente a la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) y a la Generalitat que el mejor recorrido para conectar la red de tranvía es la Diagonal, iniciando la actuación en el tramo de Glòries a Verdaguer, y defiende que es necesario impulsar el proyecto con celeridad. También comunica a la Generalitat, a través de la ATM, trabajar para una futura gestión pública de la infraestructura en toda la red y para ello se propone iniciar las negociaciones con las operadoras privadas del Trambesòs y Trambaix.
El regidor de Ciutadans, Koldo Blanco, ha subrayado que la conexión del tranvía por la Diagonal no es una prioridad y ha abogado a las Administraciones públicas a acabar la línea 9 del metro, paralizada desde años en el tramo central. Desde las filas populares, Alberto Fernández, ha definido la idea de Colau sobre el tranvía como "gesticulación sobre raíles". "No hay contenido ni presupuesto. Tampoco concreta el operador ni tiene proyecto de obra", ha dicho Fernández.
PREACUERDO ELECTORAL
Para el PDeCAT, la conexión del tranvía jamás se materializará. La regidora Francina Vila ha acusado a Colau y Maragall de tener un acuerdo preelectoral cerrado y el tranvía es la primera materialización. "Lo que se aprueba este viernes es un brindis al sol. El único tranvía que veremos es el tranvía de juguete que han traído algunas asociaciones partidarias de la infraestructura". Hace una década, la antigua CiU defendía la conexión del tranvía por la Diagonal. Ahora, el grupo municipal de Xavier Trias ha cambiado de opinión y apuesta por los buses eléctricos con la línea D30 por la Diagonal.
La CUP ha defendido la gestión pública del tranvía y quiere que la ATM inicie los pasos para recuperar la gestión pública del Trambaix y Trambesòs, ahora en manos privadas. Según el concejal Pere Casas, la gestión privada del Tram deja 14 millones de euros netos a la empresa operadora.