La lucha contra la saturación de motos aparcadas irregularmente en las aceras en Gràcia ha llevado al Ayuntamiento de Barcelona a proyectar un área verde para motos. La iniciativa, que todavía se tiene que desarrollar, implicará la puesta en marcha de aparcamientos de pago para estos vehículos en la calle en el barrio de la Vila de Gràcia, confirman fuentes municipales. Aunque todavía se tiene que concretar, el funcionamiento será similar a la de los coches, principalmente con aparcamientos para residentes. Esta área verde para vehículos de dos ruedas será la primera de la ciudad.
El consistorio ha hecho una diagnosis y la conclusión es que en el Distrito de Gràcia hay unas 2.000 motos mal aparcadas, en especial en algunas plazas y calles como Torrent de l'Olla y el Carrer Gran. El pasado mandato, los técnicos de Movilidad señalizaron aparcamientos para el 53% del parque de motos de Gràcia. Sin embargo, las actuaciones han sido insuficientes. El regidor Eloi Badia opina que son necesarias al menos otras 1.300 plazas reguladas tanto en calzada como fuera de ella, ha dicho en declaraciones a L'Independent de Gràcia.
SIN AFAN RECAUDATORIO
El edil en funciones defiende la necesidad de poner en marcha el área verde para ordenar el espacio público, proteger a los vecinos y a los comerciantes y resolver los problemas de accesibilidad que generan las motos mal aparcadas en las aceras. Badia niega que detrás del área verde haya un afan recaudatorio. El área verde de coches tiene un coste de 0,20 euros díarios para los residentes, aunque es gratuito para todos aquellos que no acumulan sanciones de tráfico. En algunos puntos de la ciudad también pueden aparcar los no residentes por horas, como en el área azul.
Los planes municipales para sacar las motos de las aceras en Gràcia, que se aplicarán en principio si no se produce un cambio drástico en las políticas de Movilidad de la ciudad, también pasan por llegar a acuerdos con los aparcamientos públicos y privados para promover el aparcamiento subterráneo de motos en el distrito. Precisamente, Gràcia es la única zona de Barcelona que cuenta con un párking exclusivo para motos que lleva abierto desde hace una década. El equipamiento, que se encuentra en la calle de Gran de Gràcia, siempre ha estado infrautilizado y en ocasiones prácticamente vacío. Curiosamente, las aceras del entorno están llenas de motos.
280.000 MOTOS
Barcelona tiene uno de los parques de motocicletas y ciclomotores más grandes de Europa, unos 280.000, y la ciudad sólo dispone de 65.374 plazas para aparcar motos en la calle, de las que este mandato se han creado unas 4.800, según los datos facilitados por el Ayuntamiento en 2018. La Guardia Urbana pone cada día una media de 3,7 multas por estacionar las motos de manera irregular en las aceras en el conjunto de la ciudad. En 2017, el total de sanciones ascendió a 1.357.