El pasado diciembre, la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) presentó la tarjeta llamada a ser la tarifa plana del transporte público en Barcelona, la T-Usual, que se puso en marcha en enero de 2020. Sin embargo, este título de transporte no es el más utilizado por los barceloneses este 2020, según los datos de principal operador, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), a los que ha tenido acceso Metrópoli Abierta.
La T-Usual permite en una zona (que incluye Barcelona ciudad) hacer los viajes que se quieran durante 30 días por 40 euros al mes. Hasta agosto, la T-Usual, junto a la T-Mes (un titulo muy similar al anterior que ya se ha dejado de vender pero que se pudo utilizar durante el primer trimestre de este año), acumulan el 31,8% de las validaciones en TMB.
LA T-10 DESAPARECIÓ EL 29 DE FEBRERO
Aunque la T-Usual y la T-Mes suman en 2020 un importante crecimiento en su uso respecto a la T-Mes en 2019 -el citado 31,8% frente al 13,8%-, los tarjetas que permiten un uso más esporádico del transporte público, como la T-Casual y la T-10, lideran el rankin de viajes en TMB este 2020, con el 32,5% del total.
La T-Casual se creó en enero de 2020. Permite hacer 10 viajes por 11,35 euros. La T-Casual debía sustituir a la T-10, el título de transporte más exitoso en el Sistema Tarifario Integrado de las dos últimas décadas. La tarjeta se dejó de vender el 1 de enero, pero la T-10 se pudo seguir utilizando hasta el 29 de febrero de 2020 con los títulos de transporte comprados hasta el 31 de diciembre, de ahí que todavía aparezca en las estadísticas de validaciones de TMB.
FUERTE CRECIMIENTO DEL PRECIO
En 2019, la T-10 fue el título de transporte más usado de largo en TMB, con el 42,8% de las validaciones. A pesar de ello, la ATM, un consorcio interadministrativo que fija los precios del transporte en el área de Barcelona, decidió suprimirlo para premiar a los usuarios más habituales del transporte público con la puesta en marcha de una tarifa plana. La tarjeta que ha sustituido a la T-10, la T-Casual, es notablemente más cara, 11,35 euros frente a los 10,20 que tenía la T-10 en diciembre de 2019.
Fuentes de la empresa TMB explican a Metrópoli Abierta que la pandemia ha cambiado los usos del transporte. Tras los meses de reclusión, los viajeros han dejado de utilizar el transporte público de forma mayoritaria, entre otros motivos por miedo, porque teletrabajan o han decidido utilizar otro tipo de medio de transporte para sus desplazamientos, lo que tiene una incidencia directa en el tipo de título que se compra.
En los ocho meses de 2020 auditados por TMB, las validaciones han caído de forma notable. Los últimos datos acumulados hasta agosto eran de 214.315.892 millones de viajes, un 47,66% por debajo de 2019 (409.504.709). En metro, la caída del pasaje hasta el octavo mes del año es del 47,15% (142.153.292 viajes) y en bus, del 48,66% (72.162.600 usos).
PÉRDIDAS DE 242,7 MILLONES DE EUROS ANUALES
TMB estima que el año se cerrará con una demanda acumulada que rondará el 57%. En el mes de diciembre se espera que los pasajeros se sitúen en el 70%. La pérdida de pasaje ha tenido una incidencia directa en los ingresos de TMB, que prevé unas pérdidas anuales de 242,7 millones por el impacto del coronavirus. El 30 de septiembre, TMB tenía un déficit de tesorería de casi 60 millones de euros. La previsión es que, a finales de octubre, ascienda otros 10 millones, hasta los 70,4 millones.
El resto de títulos de transporte más utilizados en TMB este 2020 son la T-Jove, que tiene una validez trimestral y cuesta 80 euros para una zona, y supone el 6,7% de las validaciones (en 2019 la T-Jove era el 6,2% de los viajes), y el billete sencillo, que es el 1,7% de los pagos en la empresa metropolitana frente al 2,3% de 2019. Otro 25% de las validaciones son la suma de varios títulos de transporte, entre ellos la T-4 y la T-16. En el informe de TMB ni se menciona la T-Familiar, un abono multipersonal con ocho viajes que se debe usar en 30 días y cuesta 10 euros.