La semana se presenta complicada para los usuarios de Rodalies, que el jueves y el viernes ya sufrieron dos jornadas de caos ferroviario debido a la huelga de maquinistas de Renfe. Durante el fin de semana, la normalidad ha regresado al servicio de cercanías. Pero desde este lunes y hasta el domingo, el sindicato Semaf ha convocado cuatro días más de parones que amenazan con hacer volver las cancelaciones, los retrasos y las aglomeraciones en trenes y andenes.

Los días afectados por la nueva semana de huelgas son el lunes 4, el martes 5, el jueves 7 y el viernes 8 de octubre (el lunes y el martes siguientes, días 11 y 12 de octubre, hay otras dos convocatorias). El horario de la huelga será distinto cada uno de los días. Mientras el lunes 4 de octubre hay convocados paros parciales de 5:00h a 9:00h, de 14:00h a 16:00h y de 18:00h a 22:00h, y el jueves 7 de octubre serán de 7:00h a 9:00h, de 12:00h a 16:00h y de 18:00h a 22:00h, el martes y el viernes, días 5 y 8 de octubre, los paros están previstos durante toda la jornada, entre las 00:00h y las 23:59h.

Los sindicalistas piden la incorporación de nuevo personal para las vacantes no cubiertas y la recuperación de circulaciones suprimidas. Además, los maquinistas protestan contra un eventual traspaso de Rodalies a la Generalitat.

Para las nuevas jornadas de huelga de esta semana, el Ministerio de Transportes y el Departament de Treball han previsto un 85% de servicios mínimos en Rodalies, además de un 65% en Media Distancia y un 72% en Alta Velocidad y Larga Distancia.

Aun así, las graves afectaciones al servicio registradas durante las dos primeras jornadas de huelga hacen prever que Rodalies podría volver a colapsar, varias veces, a lo largo de toda la semana.

E-MAILS Y BUROFAX PARA NOTIFICAR LOS SERVICIOS MÍNIMOS

Según las explicaciones de Renfe, el incumplimiento de los servicios mínimos por parte de un grupo de huelguistas es la causa de la avalancha de cancelaciones, 417 el jueves y 443 el viernes, y los retrasos en todas las líneas. Semaf, en cambio, asegura que se trata de un "problema de comunicación" entre la empresa y los trabajadores.

Para evitar que vuelva a producirse, la compañía ha decidido reforzar las notificaciones de cara a las próximas jornadas. Tal y como explicó Renfe este sábado, los trabajadores serán informados de los servicios mínimos por e-mail certificado y burofax. Los que tenían turno de fin de semana han recibido también una carta en mano.

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