El Ayuntamiento de Barcelona realizará una prueba piloto para implantar un nuevo pavimento drenante en la ciudad, concretamente en el carril bici de la calle Jordi Girona, en el distrito de Les Corts.
El objetivo es estudiar el comportamiento de este material para evaluar si puede contribuir a reducir el riesgo de inundaciones y, a la vez, estudiar la mejora en la seguridad viaria de los ciclistas durante los episodios de lluvias.
UNA BARCELONA RESILIENTE CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
El consistorio considera que el aglomerado drenante puede constituir un elemento más para ayudar a construir una ciudad resiliente ante los retos del cambio climático.
El nuevo pavimento permeable tendrá una longitud de 100 metros y dos metros de ancho y su implantación se iniciará en el último trimestre de este 2023.