En los próximos meses, dos arterias principales de Barcelona sumarán 900 nuevos aparcamientos para moto. Se trata de las calles Aribau y Muntaner, en obras a partir de este fin de semana.
Así lo ha anunciado el Ayuntamiento de Barcelona, con el pretexto de “liberar las aceras para los peatones”. La actuación permitirá bajar las motocicletas aparcadas en las calzadas de ambas calles, a través de la creación de un cordón de servicios que engloba aparcamientos para motos, nuevas plazas de carga y descarga y zonas para colocar los contenedores.
TRAMO REESTRUCTURADO
Esta reestructuración implica la pérdida de uno de los cuatro carriles de circulación de ambas arterias en el tramo comprendido entre la avenida Diagonal y Gran Via.
En total se crearán 900 nuevas plazas de aparcamiento para motocicletas y 90 plazas de carga y descarga. Se trata de una iniciativa votada en el marco de los Presupuestos Participativos, bajo el nombre ‘Prou autopistes a l'Esquerra del Eixample’, que quiere ampliar el espacio para los peatones en las aceras y reducir los carriles de circulación para priorizar la salud de la población.
Fachada del cine Aribau, en el Eixample de Barcelona
AFECTACIONES
En el caso de Aribau, las nuevas plazas de aparcamiento estarán situadas en la acera del lado Besòs, y en el caso de Muntaner, en sentido Llobregat. De esta forma, una vez finalizadas las obras, quedarán dos carriles de circulación en ambas vías para el vehículo privado y uno destinado al transporte público.
Las tareas –que implican trabajos de fresado, pintura y señalización– se harán primero en la calle Muntaner este fin de semana (los días 13 y 14) y comportarán la restricción de dos carriles de circulación, manteniendo en servicio un carril de tráfico y un carril bus en los cruces perpendiculares abiertos.
Posteriormente, en esta vía se pasará a trabajar solo durante los días laborales desde el 15 hasta el 26 de enero. Durante este periodo, se mantendrán abiertos dos carriles de circulación y uno de bus, que serán los que se quedarán operativos con la configuración definitiva.
En el caso de la calle Aribau, se iniciarán los trabajos el último fin de semana de enero (los días 27 y 28), cuando también se cortarán dos carriles de circulación. Después se continuará trabajando durante los días laborales desde el 29 de enero hasta el 9 de febrero, ya afectando solo el futuro cordón de servicios y dejando implantada la configuración definitiva de la vía, con dos carriles de circulación y uno de bus operativos.