Empiezan las reacciones al robo de cableado de cobre de Rodalies que ha provocado el caos este domingo electoral y ha dejado Barcelona sin trenes.

Por una parte, el Ministerio de Transportes cree que el robo es "intencionado" y, por la otra, el Sindicato Español de Maquinistas Ferroviarios (SEMAF) ha pedido una investigación judicial sobre el cúmulo de boicots que está sufriendo la red en Catalunya durante los últimos años.

Un punto de difícil acceso

Fuentes de Transportes han apuntado que las características del suceso no concuerdan con un robo de cobre ordinario, aunque remiten a la investigación policial para aclarar si tiene algún tipo de relación con las elecciones.



Transportes apunta que el corte de cable se ha producido en un punto de difícil acceso, en un paso debajo de la autopista, rodeado de cañas y al que hay que subir por un terraplén. Este punto y, por tanto, la señal quemada se encuentra a 300 metros de la estación de Montcada Bifurcació, desde donde el cableado va a parar al enclavamiento.

Un nudo ferroviario importante

Este es un nudo ferroviario "clave" en el norte de Barcelona, añaden estas fuentes, con muchas vías, cambios de aguja y señales, así como un centro de mantenimiento de Adif y un taller de Renfe.



Ante esta situación, Adif ha advertido de que el servicio ferroviario tardará en recuperarse "dada la gravedad, dispersión y alcance de los daños provocados".

Sabotajes

Por su parte, SEMAF señala que los robos son "unos sabotajes que parecen dirigidos a impedir el correcto funcionamiento del servicio, que se han incrementado en los últimos dos meses, y de los que en el día de ayer se registraron varios hasta que uno de ellos logró inutilizar el núcleo de la red, situado en la ciudad de Barcelona".

El sindicato, en una nota de prensa, explican: "Han quemado el enclavamiento de la principal bifurcación de Barcelona. Tiene cuatro salidas y controla dos de las tres líneas del norte. El enclavamiento estaba en proceso de renovación y estaba preparado ya su puesta en servicio para el mes que viene". Añaden que "desde aquí se gestiona la entrada a uno de los tres talleres de Barcelona, impidiendo la salida y entrada de trenes para hacer su necesario mantenimiento".

Un ataque al corazón de la red

Para SEMAF, "ha sido un ataque al corazón de la red de Rodalies con consecuencias imprevisibles. Este tipo de acciones están suponiendo un peligro constante hacia los profesionales y los usuarios del servicio, además de atentar contra el patrimonio e interés público y la libre circulación de la ciudadanía".

Los trabajadores aseguran que "esta circunstancia de inacción sitúa al ámbito de Rodalies en el 40% de la criminalidad que sucede en toda la red estatal. Cuando Rodalies supone un 20% de la operación".