La velocidad de los vehículos que accedan a Barcelona por el sur desde la AP-7 está limitada desde hoy a 100 kilómetros por hora los días festivos en un tramo de diez kilómetros, medida con la que el Servei Català de Trànsit (SCT) quiere reducir los alcances en esa zona y las retenciones posteriores al accidente.
Este domingo y el próximo fin de semana, que al coincidir con el puente de la Mercè incluye también ese día festivo, se implantará esta reducción de velocidad entre los kilómetros 180 y 190 de la AP-7, en dirección a la capital catalana.
Los conductores que circulen a más velocidad por ese tramo serán multados por los Mossos según la normativa vigente.
Medida ampliable
El análisis técnico de los resultados indicará si la medida se amplía a todos los domingos, festivos u operaciones retorno especiales, así como los tramos en los que se aplicaría.
La elección de ese tramo de la AP-7 se debe a que ha concentrado, en los últimos meses, un elevado número de siniestros por alcance de vehículos, lo que deriva en el cierre al tráfico de uno de los carriles y el consiguiente atasco.