La espera ha sido larga. Se ha necesitado más de un año, y un cambio en el gobierno municipal, para que Barcelona vuelva a abordar la modificación de la Ordenanza de circulación. El trámite, reclamado de forma unánime por los grupos de la oposición, pondrá el foco en los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), que tendrán una regulación más estricta.
Laia Bonet, tenienta de alcalde de Movilidad, ha expuesto este viernes los aspectos más significativos. Si se aprueba el nuevo texto, los usuarios de patinetes estarán obligados a llevar casco y no podrán circular por las aceras bajo ningún supuesto, algo que sí podrán hacer los menores de 14 años que circulen en bicicleta o los adultos que transporten a niños en vías sin carril bici.
Estos vehículos, además, no podrán llevar pasajeros, deberán contar con luces y no podrán superar los 25 kilómetros por hora en vías ciclables. En carriles bici situados sobre la acera y calles de plataforma única, el límite bajará hasta los 10 kilómetros por hora. Los usuarios de VMP que incumplan con estas exigencias, se enfrentarán a sanciones que oscilarán entre los 100 y los 500 euros.
Menos motos en las aceras
El proyecto municipal también prevé una menor presencia de motos sobre las aceras de la ciudad. Para ello, la normativa apunta la prohibición de estacionar en estos espacios cuando se encuentren cerca de centros hospitalarios y educativos.
"Continuaremos trabajando para crear más espacios de estacionamiento de motos", ha señalado Bonet, quien ha afirmado que en la capital catalana se han creado 1.575 nuevas plazas desde 2023.
BComú y ERC, aliados para la aprobación
La propuesta municipal deberá ser validada, inicialmente, en la Comisión de Movilidad que se celebrará el 19 de noviembre. En caso de obtener luz verde, el Consejo Municipal deberá dar su beneplácito definitivo diez días más tarde.
BComú y ERC reclamaron un mayor protagonismo de la bicicleta para posicionarse favorablemente al texto, sobre el que se mostraron optimistas. En el caso de los comunes, incluso, la edil Janet Sanz explicitó el apoyo de su formación con el cumplimiento de este requisito.
Los republicanos, cuya responsable en materia de Movilidad es la regidora Rosa Suriñach, se expresaron en la misma línea, invitando a "promover la movilidad activa de manera segura".
Equiparar bicicletas y patinetes
Junts se han mostrado crítico con el texto presentado por Bonet. El primer grupo municipal, liderado por Jordi Martí Galbis, ha reclamado la equiparación de bicicletas y patinetes, y han incidido en la necesidad de matricular los VMP y exigir un seguro obligatorio.
La edil Francina Vila, además, ha lamentado la falta de mirada hacia la seguridad del viandante. "Barcelona es la ciudad europea donde, básicamente, las personas nos movemos caminando. Nosotros priorizamos la seguridad vial del viandante", ha señalado.
Control sobre incívicos
El líder del PP, Daniel Sirera, también ha expresado su disconformidad con la propuesta municipal. El edil popular ha reclamado un "mayor control sobre los usuarios de patinetes y los ciclistas incívicos en la nueva ordenanza de circulación".
El regidor también ha remarcado la necesidad de que se establezca un "registro municipal de patinetes y un seguro obligatorio para los VMP", y ha reclamado que el texto permita la circulación de las motos en los carriles bus.