El Alzamora, un club de barrio con estilo propio

Un club modesto. De barrio. En pleno campus navideño, el director deportivo del Alzamora CF, Cristóbal Ramos, recibe a Metrópoli Abierta en las instalaciones de uno de los campos de fútbol humildes con más capacidad de toda Catalunya. El Alzamora C.F. cumple 70 años en 2018 y ha comenzado la temporada 17-18 introduciendo algunos cambios en el organigrama y en su metodología.

El club cuenta con siete miembros en la junta directiva y entre Cristóbal, Santi Barbany y el coordinador, José María González, se han propuesto crear estilo propio. Profesionalizar a los 24 primeros entrenadores, todos titulados pero jóvenes, tras sobrevivir a unos años difíciles por la pérdida de gestión del recinto.

“Queremos hacer todas las actividades posibles para retomar el contacto con el barrio”, cuenta Ramos. Una meta que se han marcado después de recuperar la gestión del campo en 2015. Anteriormente, lo dirigió la Fundació Marcet y les era muy complicado combinar el espacio con los entrenamientos de los 25 equipos que conforman el club al mismo tiempo que otras actividades de la fundación.

Campus navideño del Alzamora F.C. / AROA ORTEGA

No tienen peña que les arrope pero el club se enorgullece del trabajo que hacen desde la escuela de fútbol con los más pequeños, los que no compiten en ninguna liga. En cualquier caso, el Benjamín B y el Infantil A pueden presumir de ser los líderes de su categoría y el Juvenil A, segundo, detrás del Don Bosco.

Sus socios suman alrededor de un centenar, los más mayores de la zona que asisten a los partidos domingueros “cuando hace buen tiempo”, cuenta Ramos. Por eso, el club ha decidido abrirse más al barrio y trabajar con otros equipamientos deportivos. Llevan tres veranos trabajando con más de cien niños de entre 5 y 14 años con el campus ‘Un Estiu Fantàstic’ (Un Verano Fantástico). Para ello, la “Fundació de l´Esport Ei Educació de Barcelona (FEEB) ofrece unas becas que junto con las del club solventan la falta de recursos económicos que puedan tener algunas familias para apuntar a sus hijos”, asegura el director deportivo del Alzamora. El campus de verano dura cinco semanas y es multidisciplinar. “Los niños practican fútbol, ping-pong, juegan en la piscina…”, describe Cristóbal.

Oficina de admnistración del Alzamora F.C. / AROA ORTEGA

En el caso del campus navideño, el Alzamora C.F. cuenta con la colaboración de Goalkeepers, especializados en la tecnificación de porteros, pero también de jugadores. 2017 es el primer año en el que lo organizan. El horario, de 09:00 horas a 13:30 horas, está pensado para que los padres que trabajan en navidades puedan dejar a sus hijos en alguna parte de forma entretenida. La mayoría son chicos que ya juegan en el club pero el campus se abre a cualquier niño que se quiera apuntar.

En la línea de extender su presencia en la vida del barrio, desde la junta se han animado a participar en la cabalgata de Nou Barris y tantean la idea de crear algún certamen futbolístico a nivel de distrito.

Campo de fútbol del Alzamora, entre el Heron City y Meridiana / AO

CABALGATA

Con la pretensión de acercar el club al barrio, Cristóbal, el director deportivo, se dirigió en octubre a la sede del distrito y solicitó la participación del club en la Cabalgata de Reyes Magos que pasa por el barrio. Le dijeron que iban muy justos de tiempo sin ninguna pretensión en cuanto a la cifra de participantes. Sin embargo, se han llevado una sorpresa: 140 personas, entre padres y jugadores, se apuntaron y empezó la cuenta atrás para organizarse. “Una madre se encarga del vestuario, un padre de conseguir las telas, tenemos maquilladora y a una semana vista del festín, están ensayando el baile que lucirán en la comparsa de la cabalgata”, una coreografía que muestra Cristóbal en un vídeo desde su móvil.

Carro del club listo para la Cabalgata / AO

ESPACIO COMPARTIDO

El estadio del Alzamora C.F. es público pese a que lo gestiona el club de fútbol. Sin embargo, comparte varias salas de material y un espacio de unos 15m² con dos clubes más de la misma zona, el Piferrer y el Congrés. El primero tiene dos equipos y uno de ellos compite en segunda catalana. El segundo cuenta con algunos equipos que juegan fútbol base.