El barrio de Porta ha recuperado una histórica masía. Can Valent, una finca que data del siglo XVIII, se ha rehabilitado por iniciativa municipal tras años en los que los vecinos de la zona denunciaron el abandono de este elemento patrimonial por parte del consistorio.
Los trabajos de reforma de este inmueble finalizaron en febrero del año pasado, con unas obras que se dividieron en varias fases y en las que llegaron a darse descubrimientos arqueológicos que ralentizaron la ejecución de esta rehabilitación.
Pasado prácticamente un año desde la finalización de estos trabajos, la finca continúa a la espera de albergar un uso en beneficio de los residentes del barrio.
HUERTO Y JARDINERÍA
Fuentes vecinales apuntan que aún esperan conocer el futuro uso de Can Valent, y proponen que el recinto se convierta en “talleres de huerto y jardinería” para los vecinos, un espacio que se sumaría a los huertos urbanos de la calle de la Maladeta.
Estacionamiento junto a Can Valent
Para que esta actividad cuente con una mayor extensión, desde el barrio defienden la posibilidad de ampliar el espacio absorbiendo el estacionamiento que se encuentra junto a la masía. “El solar es bastante grande, se puede condicionar para trabajar”, explican tras detallar que los vecinos ya no necesitan este aparcamiento porque disponen de suficiente área verde.
Fuentes municipales señalan que aún no hay fecha para decidir el futuro uso que tendrá la masía de Can Valent.
HALLAZGOS ARQUEOLÓGICOS
Los trabajos de rehabilitación se retrasaron después de que se localizaran restos arqueológicos. Concretamente, se hallaron los restos de un pozo, un horno de leña, dos monedas y dos cubas de vino. También se localizaron pavimentos comprendidos entre los siglos XVII y XIX.
Hallazgo de restos arqueológicos durante las obras
Además, estas obras dejaron al descubierto una especie de red subterránea que habría hecho las funciones de fresquera. Su construcción data del siglo XVIII, y fue abandonada en el siglo XIX.
SOBRECOSTES
La empresa barcelonesa Vesta Rehabilitación se hizo con la adjudicación para rehabilitar Can Valent, un contrato que supuso un desembolso municipal inicial de 976.081 euros.
Masía de Can Valent tras los trabajos de rehabilitación
El transcurso de las obras requirió una inversión extra de 87.628 euros para la finalización de los trabajos, por lo que el coste final ascendió a 1.063.709 euros.