El Ayuntamiento de Barcelona y el Club d’Atletisme Nou Barris acercan posturas sobre el traslado del CE Europa a Can Dragó

Buena sintonía entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Club d'Atletisme Nou Barris (CANB). Las dos partes han acercado posturas en torno al traslado del CE Europa a las pistas de atletismo de Can Dragó y el consecuente cierre de las instalaciones deportivas del distrito de Nou Barris para acometer los trabajos de reforma. 

El consistorio, a través del Institut Barcelona Esports (IBE), y la entidad que utiliza las pistas han mantenido un encuentro durante este martes, 14 de octubre, en la sede del organismo municipal. En la reunión han participado también responsables del club de la Vila de Gràcia, de Eurofitness, gestor de la instalación, y de la Agrupació Atlètica Catalunya, que también es usuaria del recinto de Can Dragó.

"Hay buenas sensaciones por parte de todos los implicados", relatan en conversación con Metrópoli fuentes presentes en el encuentro. 

Desde el CANB han asegurado que "hay más optimismo" que tras el primer encuentro. "Podremos hacer atletismo exactamente igual que hasta ahora. Nos prometieron que podríamos entrenar en mejores condiciones y va a suceder. Tras el día 15 podremos pisar el césped y entrenar", añaden. 

Atletas durante una competición en Can Dragó CANB

Afectaciones

Según han explicado desde el club de atletismo, la llegada del Europa a Can Dragó afectará a su actividad. En primer lugar, durante las obras de reforma, los entrenos de los cerca de 500 niños que forman la escuela se desplazarán hasta la zona del césped del Lago de Can Dragó. 

"Será una incomodidad, pero será temporal y mejorará las pistas", aseguran desde el CANB. "El césped será mejor porque será como una alfombra y la iluminación será la adecuada, no como ahora", añaden.

La jaula de lanzamientos también se verá afectada. En este caso también pasará al césped del lago. Este cambio ha sido recibido con especial positivismo. "Ganaremos un espacio hasta ahora infrautilizado y podremos practicar lanzamientos con total seguridad", apuntan desde el club. 

Con el cambio, los ejercicios de lanzamientos se podrán realizar "a cualquier hora". Hasta ahora estaban limitados a las 16:30 horas de la tarde por motivos de seguridad. "En esa franja se concentraba menos gente", apuntan desde la entidad. "Salimos ganando", añaden. 

David Escudé en su despacho del Institut Barcelona Esports / LENA PRIETO (MA)

Por otro lado, el salto de longitud y de altura no estaban afectados, mientras que el salto de pértiga se reubicará en otro espacio. 

Se aplaza el cierre

Aunque inicialmente, según pudo saber Metrópoli, se programó el cierre para el pasado lunes, 13 de octubre, el consistorio ha decidido aplazar su clausura. Hasta el momento no se han licitado las obras, por lo que sin una adjudicación no era posible iniciar los trabajos de reforma. 

Según han explicado fuentes cercanas no hay una nueva fecha para cerrar las instalaciones atléticas para la reforma. 

Además, desde el Club d'Atletisme de Nou Barris han asegurado que "nunca van a renunciar a organizar un campeonato de Catalunya" en Can Dragó, como han hecho hasta la fecha. Por ello, pese a que valoran de forma positiva las obras de mejora, han asegurado que en caso de que se deba compaginar la actividad futbolística con la atlética durante un año más, será necesario volver a establecer conversaciones y pactar más mejoras. 

"Es una pista de atletismo con un campo de fútbol, no un campo de fútbol con una pista alrededor", han sentenciado desde el CANB. 

Escudo del CE Europa CE Europa

Mejoras

El Ayuntamiento de Barcelona, a través del Institut Barcelona Esports (IBE) liderado por David Escudé, invertirá cerca de un millón de euros en Can Dragó para renovar las instalaciones y cumplir con los requisitos del reglamento de Primera RFEF, división en la que el Europa ha debutado esta temporada. 

El traslado del club de la Vila de Gràcia se produjo tras agotar las vías ante la Real Federación Española de Fútbol para obtener una nueva moratoria o un permiso especial que permitiese a los de Aday Benítez disputar toda la temporada en el Nou Sardenya, un campo de césped artificial.  

Una obra complicada y su elevado coste económico obligaron al consistorio a buscar un nuevo emplazamiento y a desembolsar dinero público para cambiar el césped de Can Dragó, instalar gradas supletorias con capacidad para 3.000 personas y mejorar la iluminación.