“Consejos doy, que para mí no tengo” es una expresión popular que viene a señalar al hipócrita o, en suave, al poco coherente. En definitiva retrata a quienes reclaman a los demás conductas que ellos no practican. Y siendo ésta una máxima bastante aplicable en política, esta semana los señores de Podemos y Ada Colau se han ganado a pulso que se la dediquemos.
Tuit de la alcaldesa, instantes después de materializarse en el Congreso la incapacidad de Pedro Sánchez de tirar adelante sus Presupuestos Generales del Estado: “Bloquear unos presupuestos sociales es un error histórico: perjudica a la población, tanto en Catalunya como en España, y abre la puerta a elecciones que puede ganar la derecha y la extrema derecha. Por intereses partidistas se perjudica a la gente, especialmente a los más vulnerables. Una irresponsabilidad”. Ajá. Solo haré dos apuntes sobre el doble rasero que respiran estas palabras, viniendo de la candidata de Pablo Iglesias en Barcelona. Creo que serán suficientes para retratar la doble vara de medir que reflejan.
En primer lugar, decir que por tumbar estos presupuestos se abre camino a unas elecciones que puede ganar la derecha o la extrema derecha podría ser cierto. También podría ser falso, atendiendo a que el presidente Sánchez decía hace unas pocas semanas que no necesariamente un fracaso para tirar adelante sus cuentas debía implicar elecciones de forma automática. Pero compremos que sí que ahora le va bien al líder del PSOE avanzar comicios. En este caso, si se va a unas elecciones que gana la derecha, habría pasado algo comparable a cuando Podemos se negó a apoyar a Sánchez y eso implicó que Mariano Rajoy y su PP siguieran en Moncloa. Tema: ¿Quizás el problema está en que eso lo hacen los de Colau e Iglesias por principios, mientras que el resto lo hace por irresponsabilidad? No. Problema: incoherencia o hipocresía de este mundillo, sumadas a una muy buena concepción de uno mismo y a una muy mala del resto (también llamado “sectarismo”).
Y segundo apunte para retratar, en la línea. Ahora resultará que por ejemplo el PDeCAT, con presos políticos y exiliados, a quien tradicionalmente han tildado de “mafia” y de “derecha”, debían apoyar junto con ERC (que tampoco lo ha hecho) unas cuentas que satisfacían a Podemos y a los socialistas... porque son “presupuestos sociales” (los de los otros son lo peor, claro) y porque lo contrario “perjudica a la población”. En cambio, el Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, para pegarle un toque a Sánchez, tumbó hace unas semanas la convalidación del decreto del Gobierno de medidas urgentes en materia de vivienda. Pero tranquilos, que eso no perjudicó a nadie y, en todo caso, si lo hizo, fue por su bien, ya que lo que se proponía se quedaba corto y era mejor tumbarlo todo de un plumazo. Ajá. Mucho reñir, poco asumir. “Consejos doy, que para mí no tengo”. Tal cual.