La llegada de los casinos online ha supuesto una pequeña revolución para muchos países del área latinoamericana, entre los que se encuentra Chile. Dado que hablamos de un sector que en estas naciones no estaba debidamente regulado, tanto los operadores como los jugadores se han encontrado con ciertos problemas a la hora de jugar o desarrollar sus negocios, respectivamente. Afortunadamente, en el caso de Chile ya se ha producido la correspondiente reacción por parte del gobierno, con el desarrollo de la regulación necesaria para este tipo de empresas.
Esta permitirá en poco tiempo a los usuarios disfrutar en las mejores condiciones de seguridad y equidad de los mejores casinos online Chile, tal como pretende la legislación que regulará esta industria. Un tema sobre el que podemos darte varios detalles.
El entorno legal
Uno de los principales problemas que tienen los chilenos a la hora de jugar en un casino es que la legislación actualmente no cubre la actividad de los casinos online que operan dentro del país. Esto no quiere decir que sean ilegales, puesto que el juego online no está registrado en las viejas leyes que controlan esta actividad dentro de la Nación, por lo que su situación más concreta sería la de alegalidad. Es decir, el juego online no es algo ilegal pero tampoco está específicamente reconocido como legal. Algo que afecta a los siguientes juegos de los casinos en línea:
- Ruleta
- Slots
- Blackjack
- Dados
- Póker y Videopóker
- Juegos alternativos.
Este pequeño limbo en el que se encuentran los casinos online de chile actualmente tendrá su fin una vez que el Gobierno apruebe la ley de juego, en la que lleva años trabajando. El problema es que, como suele decirse, las cosas de palacio van despacio y la Ley del Juego chilena no ha sido una excepción.
Quejas de la competencia
De hecho, las dos leyes que actualmente están encaminadas a regular la actividad del juego online en Chile ni siquiera han llegado a las cámaras de representantes, sino que por ahora siguen dando vueltas en las comisiones correspondientes, lo que nos hace pensar que probablemente aprobación todavía este lejana.
Al menos, sí es cierto que la justicia de momento está respetando a los operadores que están actuando dentro de la situación de alegalidad comentada, tal como demuestran las respuestas a ciertas demandas impuestas por la Polla de Beneficencia de Chile contra algunos operadores de casinos online. Su desestimación es señal de que la llegada del juego y los casinos en línea a este país ya es una realidad que, como tal, debe ser debidamente regulada.
El potencial de la industria
La demora en la legislación está suponiendo serios problemas tanto para el desarrollo del sector como para el Estado en lo que a recaudación impositiva se refiere. Dado que estamos hablando de un sector alegal, no existen datos o registros específicos de su actividad potencial, pero si ciertas estimaciones realizadas por el Gobierno. Según estas fuentes, los ingresos de estas salas se situarían en torno a los 150 millones de dólares durante el ejercicio 2021.
Si aplicamos sobre estas cifras la carga impositiva que el actual proyecto de ley regulador de los casinos estaría planteando, las pérdidas en impuestos que actualmente Chile por esa falta pueden rondar los 60 millones de dólares sobre las cifras de apuesta actuales. Y es que esta cantidad es el segundo aspecto que debemos tener en cuenta.
Ingresos para las arcas estatales
Según apuntan diversos analistas, la legislación de la actividad del juego implicaría duplicar los ingresos de los casinos online de chile, al poder realizarse una mayor actividad de marketing y contar los jugadores con la tranquilidad necesaria respecto de sus apuestas. Algo que lógicamente incentivaría el crecimiento del sector y de forma paralela los ingresos obtenidos por el Gobierno.
Cómo último aspecto destacado en lo que se refiere a la carga impositiva y a los ingresos potenciales de la industria, también es importante tener en cuenta que una legalización de la actividad de los casinos también incrementaría las inversiones en marketing que realizarían los operadores.
Algo que supondría una revitalización de la economía chilena en este sector y también permitiría al Estado sumar aún más ingresos, al margen de los que se obtengan directamente de los jugadores. Y es que la legislación establece que quienes tengan la suerte en el casino deberán abonar un 15% de sus ganancias dentro de su impuesto de la renta. Otro pequeño extra para mejorar los ingresos del Estado.
--
Contenido externo