Barcelona es un paraíso de la gastronomía, de la comida multicultural y también de la dieta saludable. Los múltiples mercados ofrecen una gran variedad de productos de los que destacan la cantidad inmensa de frutas y verduras de temporada y también procedentes de otros continentes. Y la diversidad de restaurantes garantiza también opciones sanas a la hora de salir y disfrutar de una buena comida o cena. La Ciudad Condal es un oasis rico en alimentos vegetales, pescado, aceites de oliva vírgenes extra, frutos secos y otros que nos permiten comer bien tanto en casa como fuera.
La gastronomía y la nutrición tienen un vínculo muy fuerte. A nadie se le escapa que comer bien quiere decir tanto disfrutar con todos los sentidos como cuidar nuestro cuerpo. Cada vez resulta más obvio que de nada sirve una gran comilona si después nos vamos a sentir pesados o va a perjudicar a nuestra salud, a excepción de algún día muy ocasional. Y tenemos suerte pues el contexto actual es muy favorable a un cambio hacia unos buenos hábitos, pues son muchos ya los chefs y cocineros que nos han enseñado cómo preparar platos deliciosos con alimentos muy saludables. Las verduras, las ensaladas, el pescado, las legumbres e incluso los postres a base de frutas han experimentado en los últimos años toda una explosión de posibilidades creativas y apetecibles que los han puesto en primer plano en muchas cartas y menús, e incluso en muchos hogares. Eso es bueno!
Comer saludable en casa es más fácil en una ciudad como Barcelona. Solo hace falta ver las opciones de compra que hay, tanto en grandes superficies como en establecimientos más pequeños, además también con posibilidad de compras online o entregas a domicilio. En general, hay una tendencia muy positiva en poner a disposición de los consumidores más alimentos de temporada, de proximidad e incluso ecológicos. Sin ir a éstos últimos, en general, los precios son bastante asequibles, por ejemplo, el gasto medio en fruta y verdura semanal para una familia de cuatro personas que come de forma saludable está alrededor de unos 30-35€.
El pescado también es un alimento de gran valor para una dieta equilibrada y, en este sentido, Barcelona ofrece también muchas opciones en mercados y pescaderías de barrio que además nos informan de la procedencia y el modo de producción. En Barcelona tenemos la suerte de encontrar a menudo pescado de playa, como los boquerones, las mairas o bacaladillas, los gallos de San Pedro, e incluso las gambas, que, además de frescos, son muy bajos en calorías y ricos nutricionalmente. Y para postres, fruta, sobre todo fruta de temporada, pero si nos apetece variar también podemos comprar productos exóticos como la papaya, el mango, etc.
Y cuando no apetece salir de casa para disfrutar de una buena comida o cena es realmente difícil decidirse entre cocina mediterránea, catalana tradicional, vegetariana, flexitariana, japonesa o asiática en general, india e incluso fusiones tan interesantes como japonesa-brasileña. Incluso si queremos ir de tapeo hay opciones tan diversas que, entre ellas, las hay también muy equilibradas y nutricionalmente interesantes. El truco para identificar esas propuestas es el color, donde haya más colorido en los platos o tapas, por la variedad de los alimentos que los componen, ahí hay salud. Desde un sencillo pa amb tomàquet, hasta platos como el xató, la escalivada, con o sin pan de coca, la esqueixada, la escudella, los calçots con su romesco, la butifarra amb mongetes, el revuelto de setas de temporada, los mar y montaña, que combinan productos del mar y de la tierra, y las variedades de paella, hay todo un mundo que está para comérselo, con la tranquilidad de que, además, son platos dietéticamente muy correctos.
Incluso si algún día nos sentimos más carnívoros, también podemos comer bien en muchos restaurantes que ofrecen gran variedad de carnes preparadas, por ejemplo, a la brasa. Ese día os recomiendo combinarlo con unas alcachofas o unos espárragos, que, además de deliciosos aportarán fibra y una buena sensación de bienestar sobre todo a nivel digestivo e intestinal.
En mi opinión, comer bien significa seguir una dieta equilibrada, variada y sana pero también disfrutar de los alimentos y platos que tomamos. Es cierto que necesitamos comer adecuadamente para nutrir nuestro cuerpo y mantener de una buena salud actual y futura, pero de igual forma necesitamos emocionarnos con la comida que tomamos deleitando todos nuestros sentidos. Descubre el placer de comer bien mientras descubres Barcelona.
Laura Isabel Arranz es doctora en alimentación y nutrición, profesora en el departamento de Nutrición, Ciencias de la Alimentación y Gastronomía de la Universidad de Barcelona. Consultora en nutrición y salud, desarrollo de alimentos y legislación alimentaria para empresas y restaurantes. Asesoramiento nutricional personalizado. Fundadora del proyecto Gana Nutrición y creadora de la Dieta Lógica.