Botas y linternas. La próxima noche del 17 de mayo, cientos de barceloneses peinarán la calle para contar cuántas personas viven en ella. Hoy jueves, la Xarxa d'Atenció a Persones Sense Llar (XAPSLL) ya ha hecho el primer llamamiento a listas. Una especie de 'I Want You' para contar cuántos vecinos duermen en bancos, cajeros o entre escaparates. El año pasado fueron 930 voluntarios. Este año quieren llegar a los 1.100.

Si bien nos cruzamos estas personas día tras día, no hay una radiografía clara de cuántas son. En los censos elaborados, las cifras bailan. Pero aún así, “hemos de ser muy conscientes de las causas y de su magnitud”, ha señalado la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Laia Ortiz. Sí, la institución también participa, pero como un ente más. Al fin y al cabo, el recuento va de colaboración.

EL 76% LLEVA MÁS DE UN AÑO EN LA CALLE

Una vez se tengan los números y los perfiles sobre la mesa, la administración deberá diseñar sus políticas. La misma Ortiz ha admitido que “los datos no tienen ningún valor si después no se hace un análisis cualitativo y se actúa”. Por ahora, se sabe que el 76% de estos vecinos llevan más de un año sin un techo, y que el 25% ya acumulan un trienio sin hogar. Circunstancias que “erosionan su salud y la capacidad de revertir la situación”, ha esgrimido la regidora.

Para el recuento ya están casi todo planificado. Los voluntarios irán acompañados con uno de los 39 coordinadores de Distrito y radiografiarán las 287 zonas en las que han dividido Barcelona. Ahora bien, aquellos sectores que más problemas puedan representar, como las rondas, las orillas del Besòs o la zona de Collserola, los equipos de tres a cuatro personas irán acompañados por agentes de la Guàrdia Urbana y/o profesionales de Parcs i Jardins.

Este año, el recuento se volverá a llevar a cabo a través de la aplicación diseñada para el uso, aunque todavía no se abandonará el formato analógico (la libreta de toda la vida). Al fin y al cabo, los responsables de la XAPSLL creen que el aplicativo móvil todavía está demasiado verde, como para fiarse exclusivamente de él. Lo único que se le pide a los voluntarios es que sean mayores de edad y estén plenamente disponibles entre las 21:30 horas y las 2 de la madrugada. Como la experiencia acabará tarde, los organizadores recomiendan tener claro como volver después a casa.

UN CENTENAR DE PLAZAS

En la rueda de prensa, Laia Ortiz no ha escatimado la oportunidad para explicar el desarrollo del plan municipal para personas sin hogar. Tal como ha recordado la regidora, en Sant Pere Més Baix ya hay 48 plazas dedicadas a esta cuestión y funcionando a pleno rendimiento, así como las otras 41 que hay en Cal Muns para personas con problemas de salud mental. En septiembre está previsto que se ponga en marcha otro equipamiento con una veintena de plazas dedicadas a jóvenes sin hogar.

A pesar de la inversión, Ortiz ha reconocido que “hemos ido por detrás de la realidad, porque continúan creciendo las personas que están en situación de calle”. “Necesitamos que todas las administraciones pongamos la vista en el 'por qué' crece esta situación; hacen falta recursos”, ha dicho mientras criticaba entrelíneas la tarea de la Generalitat. Según ha argumentado, la situación de los sin techo está estrechamente relacionada con el problema de la vivienda.