Los responsables de Òmnium Cultural se han llevado una desagradable sorpresa este lunes al llegar a la sede de la entidad, en la calle Diputació, en el centro de Barcelona. Durante la noche, alguien, de quien por el momento se desconoce la identidad, ha llenado la fachada de las oficinas de esvásticas de color rojo.
Las esvásticas se encuentran en la fachada, y también tapando el cartel de la entidad y la puerta del edificio, como se puede apreciar en la foto.
El vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, ha denunciado las pintadas a través de su cuenta de Twitter, donde ha asegurado que la entidad seguirá siendo "profundamente antifascistas, comprometidos con los derechos y las libertades".
Mauri ha añadido que "aunque algunos lo querrían, nunca conseguirán silenciar nuestra voz".