Pedro Ruiz: "El precio de la independencia es la soledad"
Entrevistamos al artista polifacético que espera regresar a la televisión
6 enero, 2019 09:38El polifacético Pedro Ruiz prepara su regreso. Es presentador de radio, televisión, actor, escritor, cantante y humorista. Su debut en Televisión Española fue en 1972, como presentador de Estudio Estadio. Luego, vinieron concursos, otros programas y La noche abierta en La 2. Pero su independencia no ha encajado siempre bien en las altas esferas. Ahora espera que alguno de los múltiples proyectos que ha presentado pueda cuajar. Pedro Ruiz se reconoce poco en la Barcelona actual y no ve una dirección clara en la ciudad. Huye de la modernidad y lamenta que Barcelona le inspire pocas ternuras últimamente.
¿Qué hace ahora? ¿En qué momento profesional está?
Estoy estudiando mi relanzamiento y mi reaparición. Intento volver a la televisión pública, si así me lo permiten. Me he tomado un tiempo de paréntesis. El sistema no ha sido muy amable conmigo en estos últimos años.
Su idea es volver.
Hace unos 15 años que intento volver a la televisión pública. He presentado más de 30 proyectos en este tiempo. Siempre sin respuesta positiva.
Usted siempre explica que tiene problemas en la televisión pública…
Las personas independientes no tienen quien les proteja. He propuesto recuperar La Noche Abierta o hacer otros programas. He propuesto también una película, de las 30 o así que tengo escritas. Como ya sabía que venía un período de pausa, espero ver por dónde se desarrollan los acontecimientos. Pero debo decir que me siento muy poco, o casi nada, identificado con lo que está pasando en el Estado, o en el país, llámalo como quieras.
"Ahora tenemos que ver dónde termina esta desazón inaudita, e innecesaria, en la que nos han metido unos y otros"
¿Por qué lo dice?
Porque creo que la convivencia ha empeorado muchísimo. Estamos en manos de los peores de la clase que nos están dando clases. No hablo de lo que pasó ayer o antes de ayer. Las cosas puntuales no me interesan mucho. Ya las he visto. Siempre intuí, ya hace un par de décadas, que esto tomaba un camino poco brillante. Ahora tenemos que ver dónde termina esta desazón inaudita, e innecesaria, en la que nos han metido unos y otros.
Para alguien como usted, el espectáculo debe ser...
… en la historia de la Humanidad, no es diferente. Todo se repite. La vida no va de estos líos en los que estamos metidos. La vida va de ver el amanecer, ver el anochecer, de portarte bien con la gente que tienes al lado y, luego, como criatura te vas. Pero esto de ser poseídos por los símbolos, las iras y los odios me parece muy poco inteligente.
Eso conecta con usted. Ser una persona independiente puede costar caro.
El precio de la independencia siempre ha sido la soledad. Uno ya lo sabe. Hace mucho tiempo. Pero hay circunstancias y momentos en los cuales, aquellos que actúan oficialmente, desde unas posiciones u otras, tienen un poquito más de cintura, de cuerda. No vivimos ese momento.
¿No?
No. Por lo que yo veo. Por lo menos, no lo ha sido en los últimos 15 años. Ya veremos.
Pero, a priori, extraña, porque ahora hay más medios privados que podrían darle cabida...
… de uno o de otro. Y luego, lo digo con toda serenidad, siempre he pensado que esta cosa que llaman democracia, no es más que la dictadura del dinero. No hay más. Hay que pertenecer a alguna pandilla de las oficiales, de las que tienen pedigrí. Yo practico solamente la concordia y quiero que la gente se lleve bien. Sé que esto es una gran ingenuidad, pero no encuentro que nuestro paso por la vida tenga otra justificación que hacernos la estancia un poquito agradable. Todo lo demás, hombre, partiendo de la base de las necesidades de la gente que no tiene dinero y que hay que resolver la situación de los que viven en la precariedad absoluta… Todo esto no concuerda mucho con este enfrentamiento polifacético que hay en nuestra sociedad.
Usted siempre lamenta que ha sido vetado por todo tipo de regímenes, partidos y gobiernos en España.
Bueno, lo que está claro es que no estoy protegido por ninguno de ellos. Vetado, supongo que si lo digo, ellos lo negarán. Es su obligación oficial, ¿no?
"Veo una Barcelona con intención de proyectarse al futuro, que no sé bien que es eso"
Claro.
Yo me remito a los hechos. Yo quiero hacer muchas cosas. Presento proyectos a muchos sitios. En unos, dirán que gusto o no gusto. En otros, que estoy mayor o joven. En otros, que soy pequeñito… o lo que sea. Pero lo cierto es que yo hago muchísimas gestiones para estar en el sitio que me corresponde, por mis aptitudes, y eso no sale. Que cada uno saque las conclusiones que le parezcan. Pero, en todo caso, que yo le preguntaría a quien lea esto si cree más la versión de un individuo solitario que cualquier otra versión.
Está muy claro lo que dice. Diáfano. Quería hablarle de Barcelona.
Barcelona es mi ciudad. Nací en la calle del Camp 12. Mi infancia y mis recuerdos son de Barcelona. Mi educación es de Barcelona. Mi experiencia es de Barcelona.
¿Cómo ve la Barcelona actual?
Pues la reconozco poco. Igual que reconozco poco Madrid. Los nuevos usos y costumbres que han venido a hacernos, entre comillas, progresar… yo los reconozco poco en relación al sentido de la vida que tengo. Veo una Barcelona con intención de proyectarse al futuro, que no sé bien que es eso. Sin embargo, la encuentro desdibujada en cuanto a la capacidad de despertar ternuras. Y a mí las ternuras me importan mucho. También le pasa esto a Madrid, a Sevilla y a Bilbao. Creo que esto de la modernidad pasa muy por encima de los pequeños detalles. Y, a mí, eso no me gusta.
"El talento ha sido sustituido por la velocidad"
¿Qué es lo que añora, entonces?
Pues las charlas tranquilas. Las calles caminadas con tranquilidad. Los lugares donde la gente te atiende con cariño. La relación humana con personas a las que reconozco permanentemente. Todo esto está bastante alejado de la realidad. El talento ha sido sustituido por la velocidad.
¿Y qué propone para solucionarlo?
Yo no propongo nada… Pero si todos tuviéramos un ratito para la reflexión… Seguramente, todos vamos demasiado deprisa…
¿Qué haría con el tráfico y la contaminación en Barcelona, por ejemplo?
Todos queremos ir al a misma hora a los mismos sitios. Hay que valorar si vale la pena que haya 500.000 coches metidos en un casco urbano de 20 kms a la redonda. Es un error. Lo cometemos todos.
"Cuando se produjeron los atentados de Las Ramblas, el 17 de agosto, era mi cumpleaños… Me han roto mi cumpleaños"
Creo que hay una coincidencia fatídica con su cumpleaños…
Cuando se produjeron los atentados de Las Ramblas, el 17 de agosto, era mi cumpleaños… Me han roto mi cumpleaños. Ya no es mi cumpleaños, es el lamentable día del atentado. A la vista de todas las emociones que se sentían ese día, le mandé un tarjetón a la alcaldesa Ada Colau. No me contestó. No tenía por qué hacerlo.
¿Qué cosas le gustan de Barcelona?
Para mí, el mar es la vida. Pasear por la Villa Olímpica, por las Ramblas o la Barceloneta. Lo hacía con mi madre. Tengo una actitud muy serena con la ciudad. No me verás nunca en lugares, digamos, modernos. Me gusta caminar por los barrios, por la zona del mar. Yo tengo una canción dedicada a Barcelona. Invito a los lectores a escucharla. Se llama “Otoño en Barcelona”. Está todo dicho allí. Barcelona es la cuna que ha mecido mi infancia y la que me ha proyecto con un pensamiento más abierto del que existía por entonces en el resto de España.
¿Usted es un hombre de Barcelona o de Madrid?
Yo soy un bichito del Planeta Tierra. No me gusta la etiqueta de ciudadano del mundo, ni nada de eso. Creo que todos somos bichitos del Planeta. Me apunto a aquel pensamiento de que la patria es la infancia.