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“Casi lo tengo, me hace mucha ilusión, a ver si lo puedo cerrar todo, esta mañana”.  Era Montse Serrano, que intentaba organizar su viaje a la Feria de Frankfurt, la cita del mundo editorial más importante del mundo. Era en 2022, después de muchos años ocupada en su librería, la +Bernat, en la calle Buenos Aires de Barcelona, un centro cultural y social en la ciudad, escenario de múltiples presentaciones de libros, con la participación de Metrópoli y Letra Global, junto a muchos otros medios y editoriales. Montse Serrano ha fallecido tras una larga enfermedad, y deja un enorme vacío en el mundo cultural de Barcelona.

Siempre atenta y con ideas para organizar actos en la librería, Serrano había protagonizado una de las historias de éxito en el mundo editorial. La librería la había abierto con su amiga Isabel del Castillo. Pero fue en 2010 cuando amplió las instalaciones, a partir de un sex-hop que estaba a punto de cerrar. En este caso ganó el libro frente al sexo. El proyecto contó con el apoyo de Mercedes Milà y su familia, a través de un crowfunding. La librería cuenta con un pequeño bar, e invita al reposo y la lectura, siempre con un buen café a mano.

Imagen del acto de Metrópoli y Letra Global en la librería +Bernat / GALA ESPÍN (MA)

La librería ha contado siempre con el apoyo de los vecinos. Su ubicación es ideal para un alto en el camino, y escritores, políticos y muchos lectores la tienen como referencia.

Un referente

Con Montse Serrano, Metrópoli ha organizado debates sobre el ocio en la ciudad, y presentaciones, como la del libro Barcelona fantasma, del colaborador de este medio, Ramón de España. Serrano, que iba en silla de ruedas, debido a su enfermedad, llamaba, explicaba, organizaba e intervenía en los propios debates.

La librería –que ha sido atacada en varias ocasiones, producto de robos—es hoy una referencia para toda la ciudad. Un punto de encuentro para los lectores, que siempre pueden consultar qué lecturas les producirán más satisfacción, y para los barceloneses que todavía están interesados en comprar periódicos y desayunar con cierta tranquilidad y sosiego.