Los gastos en vivienda, suministros, alimentación, seguros y educación se llevan gran parte de los sueldos en cuanto la nómina entra en una cuenta corriente. Comprar un vehículo (y mantenerlo) es también otro de los gastos que no faltan en la mayoría de los hogares, que hacen malabares para llegar a fin de mes.
A menudo, se tiene que recurrir a préstamos online, como los de Avinto, si las emergencias acechan y es imposible aplazarlas. Da igual que sea para pagar una mensualidad de luz, hacer una compra o pagar la letra de la hipoteca; cuando hay que hacer frente a un pago y las opciones se reducen, hay que buscar soluciones rápidas.
Para imprevistos que no sean muy costosos, este tipo de minipréstamos resuelven si la cantidad que necesita el usuario no supera los 300 euros. Si es más, la cosa se complica porque esta es la suma máxima que se puede solicitar a devolver en un plazo de entre siete y 30 días.
CONSEJOS ECONÓMICOS PARA LA COMPRA DE UN VEHÍCULO
La decisión de comprar un coche puede estar motivada por distintos factores: laborales, familiares, por placer o, simplemente, porque se considere que es lo más conveniente en un momento concreto de la vida. Tener coche propio tiene muchas ventajas desde que se cumplen los 18 años, edad legal para conducir. Las prioridades a la hora de elegir no son las mismas cuando se es un adulto joven que cuando se pasa a ser cabeza de familia, así que la regla de la que se habla en este post es independiente de una marca y un modelo y se centra en el aspecto financiero de la compra de un coche.
Una vez clara la decisión de compra, llega saber cuánto gastar. En esta decisión hay que analizar varios factores como son: sueldo, capacidad de endeudamiento o cuánto y cómo se va a usar el vehículo en cuestión. No es lo mismo un coche con el que se trabaja moviéndose de un sitio a otro que uno que solo se coge el fin de semana y a veces. Después de la vivienda, el gasto en un coche es el más elevado para un hogar porque no solo implica a la compra; es mantenimiento y gastos relacionados (seguro, impuesto de circulación, inspección técnica de vehículos). A esto hay que añadir las averías que, a partir del quinto año, son más frecuentes de lo que se piensa.
REGLA 20-4-10
No hay una varita mágica que puede saber con exactitud cuál es la cantidad exacta que puedes gastar, pero esta regla te ayudará a valorar en que gama moverte. Las cifras son 3 por lo siguiente:
- El 20 se refiere al porcentaje que deberías tener ahorrado para dar de entrada y financiar lo justo y necesario. Un 20% de lo que cuesta el coche debe proceder de tus ahorros.
- El 4 es el número ideal de años para financiar tu compra.
- El 10 se refiere al porcentaje de tu sueldo que te puedes permitir destinar a pagar la letra y el resto de los gastos que implique tener coche.
A la hora de escoger, fíjate, además de en tu economía y todo lo expuesto, en qué es lo más práctico. Analiza bien si tienes pensado aumentar la familia en breve, qué conducción realizarás, los kilómetros que harás al año y qué uso darás al coche. En función de esto, la elección será más realista.
Tu capacidad para endeudarse también importa; cuanto más dinero necesites del banco, más difícil será que te financien. Si puedes comprar un coche con fondos que hayas conseguido ahorrar sin ayuda del banco ¡mejor! Si no, otra opción a valorar, cada vez más usada entre particulares, es el renting.
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