Visitar el túnel que conecta la Casa de l'Aigua de Trinitat Vella con la de la Trinitat Nova supone adentrarse en uno de los aspectos de la historia de la ciudad de Barcelona más trascendentes y, probablemente, más desconocidos. La importancia de llevar agua a una ciudad que desde mediados del siglo XIX no dejaba de crecer a un ritmo vertiginoso, tanto para beber como para la higiene de la ciudadanos, supuso un reto de enorme magnitud que los responsables de la época superaron de manera solvente.
El Ayuntamiento ha decidido inaugurar la recientemente rehabilitada instalación en el Día Internacional del Agua, que además sirve como punto de partida del Memorial de l'Aigua, un año durante el que el consistorio barcelonés organizará una serie de actos para dar a conocer la relación de la ciudad de Barcelona con el agua y las diferentes infraestructuras que a lo largo de los años se han ido construyendo para facilitar la llegada y el consumo de agua potable en la ciudad.
El acto de inauguración de ese Memorial del Agua se ha celebrado en la Casa de l'Aigua de Trinitat Vella y a él han asistido el concejal de presidencia, Eloi Badia, la segunda teniente de alcalde y regidora de Sant Andreu, Laia Ortiz, y Joan Gaya, nombrado Comisionado del Memorial del Agua.
La visita al túnel que recorre los apenas 300 metros de distancia entre las dos instalaciones, pasa por debajo de la Meridiana y ofrece la posibilidad de comprobar la magnitud de una obra que cuando se construyó permitía llevar el agua hasta el centro de la ciudad. Las tuberías que todavía subsisten o las enormes llaves que daban paso al agua evidencian el enorme esfuerzo que se hizo para contruir los conductos de agua potable a una ciudad que crecía a un rimo elevado y que la necesitaba de manera imperiosa.
La infraestructura fue construida por la empresa Aigües de Montcada entre 1915 y 1919. Una epidemia de tifus en 1914 obligó a las autoridades a tomar medidas para evitar nuevas situaciones como las vividas por la contaminación del agua, por lo que el objetivo primordial fue la mejora de la potabilización para evitar futuras epidemias.
PANELES EXPLICATIVOS
Las visitas podrán hacerse los domingos, a partir del 8 de abril, entre las 10 y las 14 horas, y en ellas los ciudadanos, además de recorrer el túnel de manera ascendente, es decir, desde la Casa de l'Aigua de Trinitat Vella a la de la Trinitat Nova (no hay opción de hacer el recorrido a la inversa), recibirán todo tipo de explicaciones sobre las diferentes etapas en las que se construyeron las infraestructuras necesarias para dotar de agua potable y canalizada a la ciudad.
Durante el recorrido, se han instalado una serie de paneles en los que, por medio de videos, se cuenta la historia de la construcción de las infraestructuras del agua de la ciudad. También pasarán por el impresionante depósito de agua, con una capacidad de 10.000 metros cúbicos, que guarda en sus paredes las marcas que ha dejado el paso del agua y del tiempo, y que se encuentra justo debajo de la Casa del Aigua de la Trinitat Nova, donde acaba el recorrido.