Agentes de los Mossos d'Esquadra han clausurado un local en Sant Martí después de que una pareja de mediana edad y una tercera persona de edad avanzada lo hubieran okupado en las últimas horas.

Según fuentes vecinales, uno de los okupas se ha vuelto a presenciar en la tarde de este viernes ante el local, que actualmente es propiedad de un banco, portando consigo "una mochila grande", pero al ver el precinto policial "se ha dado la vuelta" y se ha ido de la zona.

Los hechos tuvieron lugar este jueves, cuando los vecinos observaron a los tres individuos intentando romper el cadenado que habían puesto los dueños de dicho espacio. Al ver esta escena, al menos un vecino y los propietarios de este inmueble de la calle Maresme, 116, llamaron hasta tres veces a los Mossos d'Esquadra y una vez a la Guardia Urbana para que alguna patrulla acudiera a la zona. El toque de alerta no resultó exitoso ya que estas tres personas lograron instalarse en el local, pero ya están desalojadas.

EL PRECEDENTE

Consultadas por este medio, fuentes de la policía catalana admiten que les consta "desde hace días" la okupación ilegal de este inmueble. Además, confirma que ya hay abierto un procedimiento judicial al respecto y descartan totalmente que tenga algo que ver con la cuestión de los narcopisos, sino que simplemente se trata de tres personas que quieren vivir de forma permanente en este lugar y que no tienen un hogar fijo.

Da la casualidad de que este espacio propiedad del banco BBVA había sido okupado anteriormente por otra familia de origen rumano en un pasado no muy lejano. De hecho, su desalojo se produjo a principios de año, en el mes de enero. Esta información ha sido confirmada a Metrópoli Abierta por un vecino que reside al lado de esta propiedad okupada.

OKUPACIÓN

Según este mismo ciudadano residente en Sant Martí, y que prefiere matenerse en el anonimato, "ayer a las 18h de la tarde" vio "como entraba un hombre y le indicaba a la mujer que le acompañaba que le buscara herramientas. La reja estaba ya muy deteriorada, porque habían hecho ya dos intentonas antes, la última la noche anterior, con el cristal de la puerta roto", asegura.

"Llamé a los Mossos inmediatamente. A los 15 minutos lo volví a hacer. 25 minutos más tarde, llamé a la Guardia Urbana. A la hora y media volví a probar con los Mossos d'Esquadra. Resultado: han pasado la noche allí, han reparado la verja, tapado el cristal roto y están dentro. Han puesto una cadena y candado nuevos. Nadie ha venido (yo al menos no lo he visto)", lamenta este ciudadano residente en la calle Maresme.

Foto del exterior del inmueble okupado / MA



VERSIÓN POLICIAL

La policía autonómica ha confirmado la versión de este testimonio, puesto que coinciden que ninguna patrulla de los Mossos ha ido a lo largo de la jornada de ayer a echar un vistazo por el lugar. 

Aunque, eso sí, desde Mossos recalcan que ya estaban enterados de los intentos de okupación desde hace varios días, lo cual es extraño porque, según testigos en la zona, estas personas no lograron acceder al inmueble definitivamente hasta este jueves por la tarde.

Es más, según informa el cuerpo policial, ellos ya han avisado a los okupas de forma presencial que estaban cometiendo una ilegalidad y les pidieron que abandonasen el lugar. Por lo tanto, la versión de la policía catalana difiere a la de los vecinos que se han puesto en contacto con Metrópoli Abierta

DESMIENTEN A LOS MOSSOS

Por el contrario, el mismo vecino de Sant Martí asegura que esta versión ofrecida por los Mossos d'Esquadra no se corresponde con la realidad puesto que, según él, "los Mossos estuvieron el jueves por la mañana y vieron que no había nadie. Incluso comprobaron el estado de la ventana desde la escalera que da al patio de luces". Y añade que él mismo les abrió la escalera "para que pudieran ver la ventana". Desde el punto de vista de este ciudadano, "los Mossos mienten". 

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