Menos de una semana ha tardado el Ayuntamiento de Barcelona en ponerse manos a la obra e iniciar la reparación del suelo de los jardines Josep Maria Sostres, después de que el martes de la pasada semana miembros del Movimiento Diagonal Mar se personasen en la sede del distrito de Sant Martí y dejasen un "regalo" sobre la mesa del regidor, David Escudé: tres kilos de baldosas rotas envueltas en celofán y cinta roja. Una acción de protesta contra la "inacción" del consistorio y tras varios años de quejas, que precisamente ha publicado Metrópoli este 4 de octubre.
Este lunes, tan solo seis días después de la acción del Movimiento Diagonal Mar y el mismo día que lo publicaba este medio, residentes de la zona han fotografiado a los operarios del Ayuntamiento vallando el lugar afectado, que ocupa más de 50 metros de largo, y trasladando los materiales para iniciar la reparación. El jefe de obra ha confirmado que se disponían a arreglar todos los desperfectos. Pocos minutos más tarde, los mismos vecinos han podido comprobar como los trabajadores ponían en marcha la maquinaria y comenzaban las tareas de restauración que tanto tiempo llevan reclamando.
AÑOS DE QUEJAS
Fue en el mandato anterior (2015-2019) cuando el Movimiento Diagonal Mar denunció por primera vez el mal estado del ladrillo, sin que el Ayuntamiento actuase. Al poco, un menor de 12 años resultó herido cuando, al pasear por esta zona de los jardines, el suelo cedió. El chico quedó atrapado por una pierna y sufrió pequeñas heridas y algunos rasguños. Tras el siniestro, el Ayuntamiento ordenó reparar únicamente el socavón. No así el resto del tramo afectado, por lo que nadie lo arregló. Asimismo, la plataforma denuncia que, con el tiempo, ha habido más accidentes en este lugar.
Después de mucho insistir y que las quejas cayeran en saco roto, la asociación vecinal abrió una nueva incidencia, a través de la app municipal, el 22 de septiembre. Dos días más tarde, la respuesta que recibieron fue breve pero clara: "La reparación se hará cuando se disponga de la dotación económica imprescindible y se priorice en relación con otros trabajos de mantenimiento, de características similares, que se tienen que llevar a cabo en todos los barrios de Sant Martí". Sin fecha para la obra, movieron ficha y el 28 de septiembre se plantaron en la sede del distrito con el paquete para Escudé. Y al parecer al regidor le gustó el "regalo", porque finalmente ha correspondido a los vecinos con el arreglo que tanto ansiaban.