La plataforma la Fira o la Vida lo tiene claro: quiere que Fira Montjuïc desaparezca. Tras varios meses trabajando en su proyecto y tras el (sostenido) silencio municipal, el próximo jueves se plantarán en la plaza Sant Miquel para exigir a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, una respuesta oficial. El objetivo de esta plataforma integrada por unas 55 entidades sociales –entre ellas la PAH, el Observatorio DESC o la FAVB– es conseguir llevar a cabo una consulta ciudadana sobre el espacio de titularidad pública.

En esta escenificación, que tendrá lugar a las 11 horas, pretenden entregarle “de forma simbólica” una carta en la que se incluya el manifiesto. Para ello hacen un llamamiento a las distintas entidades y ciudadanos que quieran mostrar el apoyo al proyecto social. “Nos gustaría que el tema entrara a debate”, comenta Xavier Caballé, miembro de la plataforma, en una conversación con Metrópoli Abierta.

UN BARRIO 'HIPPIE': VERDE Y SOSTENIBLE

La intención de las entidades es que las 27 hectáreas que ocupa Fira Montjuïc se conviertan en un nuevo barrio de esencia hippie: sostenible, abierto, verde, con vivienda pública y comercio local. “Aprovechemos el entorno de la montaña, construyamos un barrio ejemplar y de referencia internacional”, incide el miembro de la plataforma.

Actualmente, tal como recalca Caballé, el espacio público ubicado en el corazón de la capital catalana se alquila al Consorci de la Fira “a dos céntimos de euro mensuales el metro cuadrado”. “Es un precio ridículo para un equipamiento infrautilizado”, resopla. Según calculan, habría espacio suficiente para ubicar entre 5.000 y 10.000 viviendas públicas.

EN CONTRA DEL PROYECTO UNIVERS MONTJUÏC

La cesión actual de estos terrenos termina en 2025, pero desde la plataforma aseguran que el consistorio ya ha firmado un acuerdo con la Generalitat y la Cambra de Comerç para prorrogarla. En declaraciones a Metrópoli Abierta, Fira Barcelona ha especificado que el proyecto valorado en 380 millones de euros –denominado Univers Montjuïc– se encuentra “en una fase muy inicial” y que todavía está por ver “cómo irá avanzando”. Tal como publicó este medio, las principales modificaciones acordadas en febrero pasan por una ampliación de Fira Gran Vía (en l’Hospitalet de Llobregat) y una remodelación de Fira Monjuïc peatonalizando la avenida Maria Cristina.

Vista panorámica de Plaza Espanya con el MNAC y Montjuïc de fondo 



No obstante, preguntados por este medio, desde Fira Barcelona no han querido emitir ninguna valoración respecto a las intenciones de la plataforma vecinal. Por su parte, desde la Fira o la Vida apuntan que el proyecto Univers Montjuïc es opaco y, para zanjar la tendencia, exigen abrir un debate participativo sobre el futuro de los terrenos antes de que finalice el contrato.

CAMBIAR EL CHIP PARA FRENAR LA CONTAMINACIÓN

“Hay que cambiar el chip para hacer frente a la contaminación en la ciudad”, subraya la fuente consultada. Es por eso que, según su manifiesto, es incoherente que se programen ferias como Automobile Barcelona “que promociona la venta de vehículos privados en una de las ciudades más contaminadas del mundo”.

La propuesta vecinal contribuiría a paliar la emergencia habitacional cuya petición se ha disparado un 45 % en los últimos tres años. Además, el proyecto frenaría el “incremento de los precios del alquiler” en un barrio que, según los vecinos de Poble-sec, se enfoca cada vez más al turismo. Durante la anterior legislatura, el gobierno de Colau gesticuló con la boca pequeña a favor de la iniciativa. Ahora las entidades dan un golpe sobre la mesa y piden acciones reales. La pelota está en el tejado del Ayuntamiento.