En un intento de zanjar la polémica sobre el mural en apoyo a Pablo Hasél borrado el pasado lunes por una brigada de limpieza del Ayuntamiento de Barcelona en el parque de Les Tres Xemeneies, el concejal Marc Serra ha anunciado que el consistorio lo restituirá.
A través de su cuenta personal de Twitter, el regidor de Sants-Montjuïc ha reiterado este martes sus disculpas por la eliminación del graffiti y ha explicado que se han puesto en contacto con el artista para que lo repinte. Todo a cargo del Ayuntamiento: “Cuando una cosa se ha hecho mal, no sólo hay que disculparse sino repararlo. Por esto hemos hablado con Roc Blackblock y la entidad que gestiona los muros libres Rebobinart para que se vuelva a pintar el mural. Esperamos que pueda ser pronto. El Ayuntamiento se hará cargo de los costes. Todo esto servirá para revisar los protocolos de actuación y evitar que vuelva a pasar”, ha escrito antes de sentenciar que “la libertad de expresión es la única que tiene que salir beneficiada de esta polémica”.
EL MURAL QUE LLAMABA “LADRÓN” AL EMÉRITO
El domingo, un grupo de artistas se reunió en el parque de Les Treies Xemeneies para pintar varios murales en apoyo al rapero Pablo Hasél, condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona –por comentarios vertidos en redes sociales y las letras de algunas de sus canciones– y pendiente de su inminente ingreso en prisión. Tan sólo 24 horas después, uno de ellos fue eliminado de la pared. Era un dibujo del rey Juan Carlos con un letreto en la frente en el que se podía leer la palabra "ladrón", obra del artista urbano Roc Blackblock. Lo rodeaban los mensajes "hijo putativo de dictador", "asesino de elefantes", "chorizo", "parásitos" y "llibertat Pablo Hasél".
Después de la controversia generada, algunos responsables del Ayuntamiento como el mismo Marc Serra y el concejal de Emergencia Climática, Eloi Badia, señalaron a la Guardia Urbana, comandada por Albert Batlle, por su eliminación. Incluso la alcaldesa se pronunció para pedir disculpas públicamente. Ada Colau aseguró que fue "un error que no se tiene que repetir" y anunció una revisión del "protocolo" que se había aplicado.