Las Fiestas de Sants 2023 es otra de las celebraciones más importantes de Barcelona. Las fiestas mayores arrancaron el pasado sábado, 19 de agosto, y finalizarán el 27 de agosto. Hasta entonces, las calles del barrio se engalanan para recibir a vecinos, familias y jóvenes de toda la ciudad que contemplan asombrados las diferentes temáticas de sus callejones.
A través de las 12 calles decoradas, los organizadores han querido rendir homenaje a la Tierra y a la importancia del cambio climático, ya que en muchas de las callejuelas se hace referencia a los plásticos encontrados en el fondo marino. Lejos del tono reivindicativo de estas calles también hay decoraciones que transportan al espectador al mundo de los videojuegos, como el Minecraft; a una de las series más famosas de los últimos tiempos, Stranger Things; o a los deseos de todos los vecinos que conforman el barrio de Sants.
CALLES MÁS ICÓNICAS
A continuación, Metrópoli te descubre algunos detalles de las mejores calles de este año de las Fiestas de Sants 2023. Empezamos con la calle Sagunt, ganadora del primer premio de decoración en esta edición. A través de los decorados, la propuesta del origami japonés ha obtenido la máxima puntuación del jurado. Los vecinos de Sagunt han querido acercar la cultura japonesa a Sants y han hecho una representación del origen de los deseos construyendo una gran cabeza con botellas de plástico por la que se desprenden los anhelos.
El segundo premio ha sido para la calle Papin. La decoración reivindica la importancia del cambio climático y sus efectos en las calles de la capital. Para tomar conciencia sobre este aspecto, los vecinos han representado el barrio de Sants completamente inundado por el aumento del nivel del mar.
El podio de las calles premiadas lo completa la calle Alcolea de Baix, una de las más icónicas en estas fiestas, que este año ha hecho un recorrido histórico con la luz como hilo conductor.
Otra de las calles preferidas para los visitantes es la calle Valladolid. En ella, la comisión ha querido criticar la suciedad acumulada en el fondo marino a través de una decoración de lo más bonita, con una espina de ballena, bancos de peces, medusas o un pulpo.
Para los más pequeños, su calle favorita es Vallespir de Dalt y su mundo de Charlie y la Fábrica de Chocolate. Paseando por esta callejuela, los visitantes pueden sentir el olor del chocolate, los caramelos y todo tipo de dulces que 'caen' del cielo.
A diferencia de otras fiestas de Barcelona, las de Sants mantienen su espíritu de barrio. Los visitantes que pasean por las calles respiran un ambiente tranquilo y familiar, en el que desde los más pequeños hasta los mayores disfrutan juntos de una de las celebraciones más esperadas en la capital catalana.