La construcción del carril bici impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona que dirige la alcaldesa Ada Colau (Barcelona en Comú), está causando paradójicamente estragos medioambientales en el barrio del Turó Park. Los vecinos de este enclave del distrito de Sarrià-Sant Gervasi se llevan las manos a la cabeza porque en los últimos diez días las obras de construcción del vial segregado para bicicletas, que ha levantado un fuerte rechazo en el barrio, se ha llevado por delante siete árboles entre la calle de Ganduxer, la calle de Bori i Fontestà y la plaza de Sant Gregori Taumaturg. La tala se suma a la que desde hace unos meses afecta al parque del Turó Park.
El último episodio, y el que más ha soliviantado al vecindario, ocurrió hace solo unos días a la altura de la plaza de Sant Gregori Taumaturg. La construcción de la zanja del poco ecológico carril bici se llevó por delante las raíces laterales de un platanero, lo que provocó que se torciera y se inclinara hacia la calzada. “Los plataneros tienen las raíces muy superficiales y si se eliminan de golpe, el árbol se desequilibra y se tuerce porque se queda sin agarre”, explica Bartolomé Criado, presidente de la Asociación de Comerciantes del Turó Park, quien se encargó personalmente de alertar a la Guàrdia Urbana
Detalle del árbol cortado en Sant Gregori Taumaturg en el que se aprecia el corte lateral de la raíz / B.C.
Mientras llegaban los agentes policiales, los propios operarios de la obra calzaron el árbol para que no se desplomara. Sin embargo al final tuvieron que acudir al lugar los Bombers para talar el árbol, que posteriormente fue retirado por una grúa debido a que suponía una amenaza para peatones y vehículos. Los vecinos pidieron entonces explicaciones al ayuntamiento, quien no reconoció el origen del incidente y se limitó a responder que el árbol había sido retirado “por motivos de seguridad”, porque “estaba torcido”.
UNA VECINA SE AGARRÓ A UN ÁRBOL PARA DEFENDERLO
El suceso ha provocado una gran indignación en el Turó Park porque desde que se inició la construcción del carril bici hace unos seis meses “han desaparecido” otros seis árboles de la vía pública: tres en la calle Borí i Fontestà y otros tres en la calle Ganduxer. “No se nos han dado ninguna explicación por la tala, siempre se actúa sin avisar y sin preguntar”, lamenta Criado. El malestar vecinal es tan grande que Sonia L., una vecina del barrio, incluso se agarró al tronco del árbol situado justo frente al número 6 de la calle de Borí i Fontestà para así defenderlo y evitar que fuera eliminado. Aunque sin éxito.
Video del momento en el que se desploma el árbol dañado de la plaza de Sant Gregori Taumaturg
La tala de árboles se suma a las quejas levantadas por el carril bici, una infraestructura que los vecinos califican de “innecesaria”. Por ejemplo, en la calle Borí i Fontestà “no tiene sentido poner un carril para bicicletas cuando la circulación ya está restringida a 30 kilómetros por hora”. En la etapa del exalcalde socialista Jordi Hereu estas dos circunstancias eran “incompatibles”, recuerda Bartolomé Criado. El vecino del Turó Park también echa en falta que, curiosamente, “ninguna entidad ecologista se haya movilizado por la tala”.
Tampoco creen que tenga sentido habilitar una vía segregada para bicis en la calle de Ganduxer cuando tiene una fuerte pendiente “que no sube en bicicleta ni Indurain”, ironiza el presidente de los comerciantes del barrio. “Este carril bici es completamente innecesario, no va a utilizarlo nadie” vaticina el presidente de los comerciantes, quien también denuncia que en los últimos meses se han cortado “unos 70 árboles” de los jardines de Eduard Marquina, presumiblemente mientras se ejecutaban trabajos de mantenimiento, los dos últimos la semana pasada.
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