Futuros pisos de lujo de Can Raventós en Barcelona / CORPEDIFICACIONS, S.L.
Barcelona 'peleará' por evitar que se construyan pisos de lujo en la Masia de Can Raventós
La teniente de alcalde de urbanismo, Laia Bonet, ha planteado que el distrito deberá escoger entre más vivienda y un nuevo refugio climático
El gobierno de Barcelona, con Jaume Collboni a la cabeza, se ha comprometido a seguir negociando para impedir que se edifiquen pisos de lujo en el terreno que ocupa la masia y los jardines de Can Raventós, en Sarrià.
Lo ha hecho como respuesta a petición de ERC, que el pasado martes instó al Ejecutivo local a seguir negociando "con las entidades vecinales, para hacer posible que la finca de Can Raventós llegue a ser pública en su totalidad".
También han pedido, en connivencia con las históricas reclamaciones vecinales, que "se considere la protección del jardín y el arbolado como parte del entorno indisociable de la masía, ya protegida".
De esta manera, al considerar tanto el edificio como el entorno una entidad única, sería imposible edificar viviendas en el territorio que ocupan los jardines. La plataforma Defensem Can Raventós apoya esta línea, que daría pie a abrir el espacio y dotar al barrio alto de una zona verde.
Pacto en borrador
Si bien el PSC ha dado respuesta afirmativa a las dos cuestiones planteadas por los republicanos, la cuestión, litigios aparte, se encuentra con un importante escollo: Barcelona no tiene suficiente terreno en propiedad municipal --en el distrito-- para canjeárselo a la promotora Corp, que quiere mantener el proyecto de construcción.
La finca de Can Raventós entre Bonaplata y Fontcoberta / SALVEM CAN RAVENTÓS
Por el momento, sobre la mesa existe un borrador de pacto por el que el consistorio se haría con el 68% de los terrenos y la edificación por unos 8,7 millones de euros. La inmobiliaria, por su parte, se quedaría con algo más de 1.600 metros cuadrados para edificar. Este principio de pacto, no obstante, cuenta con el frontal rechazo vecinal.
Jardines o viviendas
La teniente de alcalde de Urbanismo, Laia Bonet ha considerado que es necesario analizar "qué implica preservar todo el jardín en términos de ganancias y pérdidas".
"Debemos ser conscientes de qué implica un acuerdo de máximos para que todo el jardín sea público y no haya viviendas, y significa renunciar a que las viviendas que se querían construir en Sarrià-Sant Gervasi no se construirá en el distrito, porque no hay más solares de titularidad municipal disponibles para reubicar esas viviendas", ha ponderado.
