Los Mossos d'Esquadra han detenido a un exinspector de trabajo que, tras jubilarse, se dedicaba a realizar visitas a establecimientos comerciales regentados por extranjeros, a los que pedía sobornos a cambio de no multarles por supuestas irregularidades.
El hombre, de 66 años, también era abogado y se valía del desconocimiento de la legislación vigente por parte de los propietarios de los comercios, además de su desconocimiento del idioma, para estafarles. Los Mossos tienen contabilizados 18 establecimientos en los que habría actuado.
La investigación se inició en 2017 después de que un comerciante le denunciara. Cuando los Mossos d'Esquadra llegaron al supermercado, le detuvieron. Para engañar a sus víctimas, les mostraba el carnet de insperctor de trabajo y cuando encontraba algún elemento que podría ser sancionable, ofrecía ignorarlo a cambio de un soborno cuya cuantía establecía inferior a la que supondría la multa.
Al detenido, de nacionalidad española, se le atribuyen 39 delitos de usurpación de funciones públicas, 18 delitos leves de estafa y nueve de falsificación documental.