Brutal agresión de unos manteros a un turista en BCN
El hombre recibió todo tipo de golpes, incluso con un cinturón, y acabó ingresado en el Clínic
2 agosto, 2018 19:15Noticias relacionadas
Brutal agresión de unos manteros a un turista norteamericano en la plaza de Catalunya de Barcelona. En un vídeo que se puede ver en las redes sociales, el hombre recibe todo tipo de golpes por parte de un grupo de vendedores ambulantes no autorizados -entre seis y ocho- y cuando consigue zafarse de ellos aparece otro mantero que le persigue y golpea con un cinturón. El turista tuvo que ser ingresado con una fuerte hemorragia por los golpes recibidos, el más grave en la cabeza. En la grabación también aparece otro turista, que solo recibe un golpe y sale mejor parado de la agresión.
Los hechos tuvieron lugar la noche del miércoles alrededor de las 21.25 horas. Una usuaria, Ana, fue la que grabó las imágenes y las difundió a través de su cuenta de twitter. En un segundo vídeo, se ve como los manteros se ensañan a golpes con un turista muy corpulento, cerca del bar Zúrich, donde en un primer momento se situó el ataque y del que Metrópoli Abierta ha publicado imágenes con sangre en el suelo en la terraza del establecimiento.
Pasó a las 21:22 pic.twitter.com/ahTDGcb29g
— Ana (@AKur0mu) 2 de agosto de 2018
MUJER INCREPADA, SEGÚN UNA VERSIÓN
Por ahora se desconoce con certeza el motivo que causó la agresión. La versión más difundida es la que explicó el secretario de Organización del sindicato CSIF y agente de la Guàrdia Urbana, Eugenio Zambrano. Al parecer, una mujer que iba con un carrito con un niño pequeño recriminó a los manteros que no podía pasar por la acera. La mujer fue increpada y el ciudadano norteamericano intervino para mediar y separar a las partes, según la versión de Zambrano, aunque en los vídeos difundidos no aparece ninguna mujer.
También grabé este fragmento donde se ve el ensañamiento con el hombre que luego ingresaron. Después del primer video grabé esto. pic.twitter.com/KoIQ6Dc2xH
— Ana (@AKur0mu) 2 de agosto de 2018
Como consecuencia de los golpes, la víctima sufrió varias heridas y cortes que le hicieron perder mucha sangre. Una de las heridas más graves y la que más sangraba fue en la cabeza. Fuentes del Sistema de Emergencias Sanitarias (SEM) confirmaron una intervención en el Zúrich para atender al herido y trasladarlo, posteriormente, al Hospital Clínic. El pronostico facilitado por el SEM es de "menos grave". Tanto la versión del Ayuntamiento de Barcelona como la de los Mossos coinciden con las imágenes difundidas. La policía autonómica asegura que el herido ya ha sido dado de alta y que se está intentando localizarlo para que presente una denuncia.
CRÍTICAS DE LOS GRUPOS MUNICIPALES
Uno de los primeros en reaccionar ha sido el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández. El concejal ha lamentado la agresión y ha reclamado al gobierno de Ada Colau que el Ayuntamiento se persone como acusación particular y acabe con su permisividad hacia el colectivo de vendedores ambulantes. El PP ha acusado a Colau de silenciar el ataque.
También el concejal del PSC, Jaume Collboni, ha reaccionado a la noticia a través de las redes sociales y ha enlazado la noticia de Metrópoli Abierta: "Exigimos explicaciones inmediatas al Gobierno de Colau sobre estos hechos. Situaciones de violencia en la calle son intolerables en Barcelona", ha escrito Collboni. El regidor socialista quiere saber cuántos agentes de la Guàrdia Urbana están patrullando este agosto en Barcelona. "Queremos una ciudad segura".
Exigim explicacions inmediates al Govern Colau sobre aquests fets. Situacions de violència al carrer són intolerables a Barcelona. https://t.co/otaJeDx6pO
— Collboni BCN (@jaumecollboni) 2 de agosto de 2018
Desde las filas de Ciutadans, la regidora Carina Mejías ha denunciado que la permisividad de Colau con los manteros es insostenible. "Pese a las reiteradas denuncias de la oposición y comerciantes siguen sin hacer nada y la situación se agrava cada día. Las agresiones a urbanos y turistas no pueden quedar impunes".
El regidor de ERC, Alfred Bosch, ha condenado la agresión y deseado una pronta recuperación al herido. "Exigimos que se actúe porque hasta ahora el gobierno de Colau solo ha generado más conflictividad derivada del top manta". Y desde las filas del PDeCAT, el concejal Jaume Ciurana ha subrayado que "son inadmisibles los comportamientos violentos y criminales. Colau está hundiendo Barcelona con su actuación como alcaldesa. No es política. Es incompetencia y frivolidad".
La teniente de alcaldía, Laia Ortiz, ha lamentado también la agresión: "A la espera de la investigación de los Mossos sobre los hechos del miércoles en la plaza de Catalunya. Condenamos cualquier agresión o muestra de violencia en las calles de Barcelona". Colau, aunque ha hecho varios tweets a lo largo del día, no ha dicho nada sobre el caso.
A l’espera de la investigacio de Mossos sobre els fets d’ahir a Plaça Catalunya, condemnem qualsevol agressió o mostra de violencia als carrers de Barcelona.
— Laia #Comuns (@Laiaortiz) 2 de agosto de 2018
CRÍTICAS DEL SINDICATO CSIF
El sindicato CSIF ha dicho que la agresión al turista es fruto de la dejadez y el apoyo institucional del gobierno de Colau hacia los manteros. Según Zambrano, a diario los policías reciben peticiones de ciudadanos indignados para que actúen contra la venta ambulante no autorizada "y la respuesta que les tenemos que dar es que no hay un mandato claro para actuar por parte de Colau, máxima responsable de la policía local, y que tampoco disponen de los recursos necesarios para combatir el problema".
CSIF asegura que estos vendedores actúan con mucha agresividad y recuerda que el pasado diciembre un agente de la Guàrdia Urbana ya fue herido de gravedad en un ojo por una pedrada arrojada por un mantero en la plaza de Catalunya. Para Zambrano, actualmente "Barcelona es una ciudad sin ley" en la que están creciendo los índices de delincuencia. En verano, denuncia Zambrano, se acentúa el problema de los narcopisos y el incivismo provocado por turistas jóvenes. CISF reclama a Colau más efectivos personales y materiales para que los agentes puedan hacer bien su trabajo.