Todos los frentes están abiertos. Los Mossos d’Esquadra todavía no han aclarado qué ocurrió la noche del sábado en la peluquería Spejo’s de Sarrià cuando, sobre las nueve de la noche, un hombre con la cara tapada y con un arma de fuego disparó a un hombre de 47 años.
La víctima, que sufrió cinco disparos, dos de ellos letales, era el marido de la propietaria de la peluquería situada en la calle Manuel Girona de Barcelona.
Todas las hipótesis están abiertas por parte de los agentes policiales y el grupo de homicidios de la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d’Esquadra de Barcelona, que trabajan a contrarreloj para descifrar lo ocurrido.
HIPÓTESIS
El supuesto ladrón no se llevó nada de la caja registradora de la peluquería. A pesar de ser la hora de cierre, el hombre que accedió al establecimiento no se llevó nada de dinero. Además, a los agentes no les encaja que el criminal llevara una arma de fuero sólo para asaltar una peluquería de la ciudad.
La teoría que cada vez gana más peso es una posible revancha. La hipótesis todavía está en una fase muy inicial, pero el autor del crimen entró con la cara tapada y empezó a disparar sin ton ni son, pero sin asaltar el botín del establecimiento.
EL OBJETIVO ERA EL HOMBRE
La policía también está investigando si el criminal huyó solo del comercio o tenía algún cómplice que lo ayudó para fugarse. De momento no se ha detenido a nadie y los investigadores estiran los hilos del entorno personal de la víctima para intentar descubrir qué pasó.
De momento, una cosa evidente es que el objetivo era el hombre, ya que el asesino entró en la peluquería y fue directamente a por él, que hacía poco rato que había llegado a la peluquería de su mujer.