Cientos de manifestantes, la mayoría de ellos jóvenes, ponen en jaque a los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra en las inmediaciones de la Delegación del Gobierno, situado en la calle Mallorca.
Algunos de ellos han provocado peligrosas hogueras, a las que los agentes de la policía catalana han respondido con fuertes cargas policiales. Los jóvenes, que siguen instrucciones de los CDR han lanzado botellas, piedras y todo tipo de objetos contra el cordón policial.
Los Mossos por su parte se han limitado a aguantar, dada su inferioridad numérica. Aun así, en los momentos de máxima tensión han disparado bolas de foam contra los manifestantes.
La Policía Nacional ha acudido a la llamada de los Mossos d'Esquadra. Una decena de furgonetas ha aparcado en la calle Pau Claris y los manifestantes se han retirado parcialmente.
HOGUERAS POR PASEO DE GRÀCIA
Al dispersarse, algunos grupos se han dirigido al paseo de Gràcia donde han generado más hogueras en distintos puntos de la vía. En estos momentos la protesta se ha dispersado por toda la zona y se ha hecho muy complicada de controlar para las fuerzas policiales.