Los robos con violencia en las calles de Barcelona han aumentado un 25,4% este 2019. Tras la reunión de la Junta Local de Seguridad de este jueves, el consejero de Interior, Miquel Buch, ha destacado que la presión policial ha conseguido frenar el aumento de delitos a partir de julio. El año pasado, sin embargo, el índice de criminalidad aumentó un 2,9% respecto a 2018.

Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana han subrayado el descenso del 1,2% de los hurtos en 2019. Por contra, los robos violentos en la vía publica se disparan. En total, se produjeron 9.096 delitos de este tipo, la mayoría tirones de bolsos y mochilas. 

EIXAMPLE Y CIUTAT VELLA, LOS PUNTOS NEGROS

Eixample y Ciutat Vella son los puntos negros donde más hurtos y robos con violencia se producen. El máximo responsable de la policía autonómica no ha dado detalles sobre las causas de este aumento de los robos. "Se está dando la vuelta a la situación.

"En Ciutat Vella, los delitos han bajado", ha subrayado Buch. En un contexto con la seguridad como principal preocupación para los barceloneses, el consejero de Interior ha explicado que la "seguridad objetiva" no siempre coincide con la "seguridad subjetiva". El consejero ha insistido en que aunque la percepción es de inseguridad, los delitos bajan.

Sobre la problemática de los narcopisos del Raval, que en los últimos meses han regresado con fuerza, Batlle se ha mostrado "preocupado" por el fenómeno y ha expresado la necesidad de atacar el problema con "intervenciones de carácter integral" desde políticas de vivienda y urbanística.

LOS ROBOS EN VEHÍCULOS, AL ALZA

Otra de las conclusiones de la Junta Local de Seguridad es la constatación de que los robos con fuerza en vehículos se ha disparado. Estos delitos aumentaron un 27% en 2019, un incremento que ya s empezó a notar en 2018. Los delincuentes rompen las lunas de los coches para intentar robar cualquier objeto de valor en su interior.

Los robos con fuerza en domicilios han caído un 9,3% respecto a 2018.

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