Baltimore, con 300 homicidios en 2019, es una de las ciudades más violentas de Estados Unidos, perfectamente retratada en la serie The Wire. Con una población de 630.000 habitantes y epicentro de un área metropolitana de 2,6 millones, su alcalde está muy preocupado por el rebrote de los delitos y las muertes violentas. El miércoles, Jack Young hizo un llamamiento a la calma. Pidió a sus vecinos que dejaran de matarse para no saturar los hospitales en plena crisis del coronavirus.
Young fue muy claro. “No podemos bloquear nuestros hospitales y sus camas con gente que sufre disparos sin sentido porque vamos a necesitar esas camas para los infectados con coronavirus. Y podrían ser sus madres, sus abuelas o alguno de sus parientes. Ténganlo en cuenta”, expresó el alcalde de Baltimore, la ciudad más poblada del estado de Maryland.
SIETE PERSONAS HERIDAS
Las declaraciones de Young se produjeron horas después de que siete personas resultaran heridas por los disparos de un hombre armado en Madison Park. “No toleraremos tiroteos masivos ni un aumento de los delitos”, añadió el alcalde, preocupado por los cinco casos de coronavirus detectados ya en la ciudad estadounidense. La cifra asciende hasta 80 en todo el estado de Maryland.
El resurgir de los delitos en Baltimore está estrechamente relacionado con el aumento del consumo y venta de drogas.