Un robo con extrema violencia en el metro conmocionó a los barceloneses el pasado mes de febrero. El atraco se produjo el 31 de enero, pero la noticia saltó a los medios de comunicación la primera semana de febrero. La violencia desatada del ladrón quedó registrada por las cámaras de seguridad de TMB, lo que facilitó la identificación del individuo por parte de los Mossos d'Esquadra.
Casi dos meses después, la Guardia Urbana de Barcelona ha detenido en un control rutinario al joven que había sido identificado por la policía catalana como supuesto autor de la violenta agresión a una viajera del metro.
JOVEN Y CON ATECEDENTES
Según EFE, el joven, de nacionalidad española y con varios antecedentes, ha ingresado ya en prisión preventiva por orden judicial acusado de este robo violento, que se hizo viral en las redes sociales, ocurrido a las 23.07 horas del pasado viernes 31 de enero, semanas antes de que se decretara el estado de alarma por el COVID-19.
El joven fue sorprendido el pasado miércoles, 25 de marzo, a las 3.15 horas de la madrugada, en plena calle, pese a las restricciones de movilidad por el decreto de alarma por el coronavirus, por lo que una patrulla de la Guardia Urbana procedió a identificarle.
VIOLENCIA POR UN BOLSO
Tras tomarle los datos personales, los agentes comprobaron que los Mossos d'Esquadra habían lanzado una alerta policial sobre este joven, ya que le habían identificado como el autor de la agresión a la pasajera del metro en la estación de Navàs, de la línea 1. Por este motivo, los agentes le detuvieron y lo pusieron a disposición de los Mossos d'Esquadra.
El asalto se produjo a las 23.07 horas del viernes 31 de enero, en un vestíbulo secundario de la estación de Navas, de la L-1 del metro, cuando un joven encapuchado abordó a una mujer, a la que tiró al suelo y propinó varios golpes para intentar robarle el bolso.
La víctima, que denunció este robo violento, pudo salir por su propio pie de la estación, sin pedir ayuda ni avisar a los responsables del metro.
Los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación para tratar de identificar al autor de esta agresión, especialmente a través de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad de la estación.
Finalmente, los Mossos lograron identificarle y comprobaron que tenía varios antecedentes, por lo que pusieron sus datos en la base conjunta de los cuerpos policiales, lo que ha permitido que la Urbana le detuviese en un control rutinario, de madrugada, y que ya esté en prisión.