La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura ha condenado a cuatro años de prisión a un hombre por suplantar una identidad para practicar sexo. El individuo mantuvo relaciones sexuales completas con una mujer haciéndose pasar por un amigo suyo.
Los hechos ocurrieron en 2017 tras una noche de copas. La víctima, que será indemnizada con 1.000 euros, quedó con una amiga que, a su vez, estaba con otros tres amigos. El grupo se fue a casa de uno de ellos a continuar la fiesta. Tras horas de charla, la mujer dijo que estaba cansada y preguntó si había alguna habitación libre para acostarse.
SE COLÓ EN LA HABITACIÓN
Una vez se encontraba en una de las estancias, uno de los hombres se coló en ella. Se comenzaron a besar y mantuvieron relaciones sexuales de manera consentida. Al finalizar el acto, la mujer se durmió y su pareja se fue a fumar.
Aprovechando la ausencia de su amigo, el condenado entró en la habitación y comenzó a acariciarla. Pensando que era su pareja, la mujer sucumbió a los encantos y terminaron realizando el acto. Cuando ella se giró y se dio cuenta de quién era le espetó "¿Tú qué haces aquí?", justo cuando el que había salido a fumar regresó. Al ser cuestionado, el acusado se marchó.
EL CONDENADO INTENTÓ MANIPULAR LA VERSIÓN
Ante la justicia, el agresor sexual ofreció una versión distinta a los hechos: aseveró que la mujer le dijo que podía acostarse con ella y que esta había accedido a mantener relaciones consentidas.